El panteón nehekharano

El panteón nehekharano

La gente de la Tierra Bendita venera a varios dioses y diosas, tanto mayores como menores, como parte de un antiguo acuerdo conocido como el Gran Pacto. Según la leyenda, los nehekharanos se encontraron por primera vez con los dioses en el lugar que ahora ocupa Mahrak, la Ciudad de la Esperanza. El sufrimiento de las tribus conmovió a los espíritus eternos, que los socorrieron en medio del páramo del desierto. A cambio de la adoración y devoción eternas de los nehekharanos, los dioses se comprometieron a convertirlos en un gran pueblo y a bendecir sus tierras hasta el fin de los tiempos.

Cada una de las grandes de ciudades de Nehekhara le rinde culto a una de las deidades mayores como patrona, aunque la devoción a Ptra, el Gran Padre, es preeminente. Al sumo sacerdote de un templo nehekharano se lo denomina hierofante. En todas las ciudades salvo en Khemri, al sumo sacerdote de Ptra se le llama gran hierofante.

Además de al clero, todos los templos nehekharanos adiestran a una orden de guerreros sagrados conocidos como los Ushabtis. Todos los Ushabtis consagran su vida al servicio de su deidad patrona y, a cambio, se les conceden habilidades sobrehumanas. Estos dones sitúan a los Ushabtis entre los guerreros más poderosos de toda la Tierra Bendita. Desde los tiempos de Settra, el primer y único emperador nehekharano, los Ushabtis de cada ciudad han ejercido de guardaespaldas para el rey sacerdote y su casa.

Los catorce dioses y diosas más destacados de Nehekhara son los siguientes:

Ptra: también llamado el Gran Padre, Ptra es el primero entre los dioses y el creador del género humano. Aunque se le rinde culto por toda Nehekhara, las ciudades de Khemri y Rasetra lo reivindican como su patrón.

Neru: diosa menor de la luna y esposa de Ptra. Protege a todos los nehekharanos de los males de la noche.

Sakhmet: diosa menor de la luna verde, también llamada la Bruja Verde. Es la intrigante y vengativa concubina de Ptra y tiene celos del amor del Gran Padre por el género humano.

Asaph: diosa de la belleza, la magia y la venganza. Asaph es la diosa patrona de Lahmia.

Djaf: el dios de la muerte, con cabeza de chacal. Djaf es el dios patrón de Quatar.

Khsar: el feroz y maligno dios del desierto. Es un dios cruel y ávido al que veneran las tribus del Gran Desierto.

Phakth: el dios del cielo con cabeza de halcón y proveedor de justicia rápida.

Qu’aph: el dios de las serpientes y la sutileza. Qu’aph es el dios patrón de Zandri.

Ualatp: el dios con cabeza de buitre de los carroñeros.

Sokth: el traicionero dios de los asesinos y los ladrones. Basth: la diosa de la gracia y el amor.

Geheb: el dios de la tierra y dador de fuerza. Geheb es el dios patrón de Ka-Sabar.

Tahoth: el dios del conocimiento y guardián de las tradiciones sagradas Tahoth es el dios patrón de Lybaras.

Usirian: el dios sin rostro del averno. Usirian juzga las almas de los muertos y decide si son dignas de pasar a la otra vida.