Notas finales

 

 

El mundo de ayer de Zweig fue un punto de referencia constante, inspiración y complemento de mis propias reflexiones sobre su historia. Se ha comentado mucho la reserva del libro sobre detalles de su vida privada, pero la emoción en el tono de Zweig a menudo es tan inmediata y sin reservas que resulta reveladora de su carácter y su estado mental, mientras la franqueza técnica sobre el escándalo personal a veces puede oscurecerlos. He llegado a sentir que es un libro mucho más desnudo de lo que generalmente se ha considerado... Está trufado de confesiones sorprendentes, que son fáciles de pasar por alto, entre el fluido recuento de felices reuniones con famosos intelectuales, logros estéticos fabulosos y arrolladoras y tumultuosas escenas de cambio social. El enigma de ciertas afirmaciones que hace Zweig sobre sus experiencias personales, junto con el milieu más amplio en el que se movía, resultan muy provocativos, si se examinan de cerca. Mientras se escribía la mayor parte de este libro, me apoyé en la útil traducción inglesa del editor de Zweig, Benjamin W. Huebsch, con Helmut Ripperger. Tuve la fortuna de leer la nueva traducción de Anthea Bell en la parte final de mi trabajo. (Pushkin Press, 2009.) La suya a menudo es una versión mucho más vivaz y persuasivamente coloquial. Un pequeño número de citas de su traducción se encuentran diseminadas por el texto, las demás son de la versión anterior.

 

 

CARTAS

 

La voluminosa correspondencia de Zweig también ha proporcionado materiales cruciales para este libro. Entre las colecciones que consulté, se encontraban las cartas de Zweig a Friderike, algunas de las cuales han sido publicadas en inglés con el título Stefan and Friderike Zweig: Their Correspondence 1912-1942, traducidas y editadas por Henry G. Alsberg, con la ayuda de Erna MacArthur (Hastings House, 1954). Consulté también la colección alemana, más completa y fechada con precisión, Stefan Zweig Friderike Zweig Briefwechsel 1912-1942, Herausgegeben von Jeffrey B. Berlin und Gert Kerschbaumer, (S. Fischer, 2006). Stefan and Lotte Zweig’s South American Letters: New York, Argentina & Brazil, 1940-1942, meticulosamente editada por Darién J. Davies y Oliver Marshall, (Continuum: 2010), ha sido una referencia frecuente para mí, tanto con respecto a citas específicas como al entorno de la atmósfera general de la vida de los Zweig en Brasil. Este volumen contiene también una parte dedicada al tiempo que pasó la pareja en Nueva York, con citas de muchas de las cartas que escribieron los Zweig en este periodo. Todas las cartas publicadas en esta colección fueron escritas originalmente en inglés, como unas cuantas de las cartas de Zweig a Friderike, Ben Huebsch y otros corresponsales, especialmente después de que estallara la guerra entre Inglaterra y Alemania, cuando las ventajas de escribir en inglés para evitar problemas con la censura superaban el problema del inglés de Stefan. (El inglés de Lotte era mejor, pero también era irregular.) He corregido los errores de ortografía o sintácticos cuando confundían las cosas. Por ejemplo, tanto Stefan como Lotte tendían a escribir Nueva York como una sola palabra, «Newyork». Lo he corregido. También he regularizado la ortografía del nombre de la cuñada de Lotte, a quien ella siempre llama «Hanna» y Stefan casi siempre «Hannah». Junto con las cartas entre los Zweig y la familia de Lotte publicados en Davis y Marshall, he tenido la fortuna de poder hacer varias visitas a los archivos de Stefan Zweig en la Universidad del Estado de Nueva York (SUNY) en Fredonia, donde he leído cartas tanto publicadas como sin publicar de los Zweig, incluyendo su correspondencia completa desde Estados Unidos a la familia de Lotte en Inglaterra. Gerda Morrissey, la archivista principal de esta colección, me ayudó en innumerables ocasiones. Su ayuda fue inestimable. No solo rastreó fuentes difíciles de encontrar, sino que cedió siempre con gran amabilidad a mis ruegos a veces frenéticos de que me escaneara algún material en el último momento, e incluso me ayudó a traducir las cartas. Un escritor no puede encontrar a una archivista más eficaz, y le estoy profundamente agradecido. Muchas de las cartas más importantes en la correspondencia entre Ben Huebsch y Stefan Zweig se han publicado en dos artículos muy interesantes de B. Berlin. Un cierto número de sus primeras cartas aparece en «Some Unpublished Stefan Zweig Letters, with an Unpublished Zweig Manifesto», publicado en Turn-of-the-Century Vienna and its Legacy: Essays in Honor of Donald G. Daviau, editado por Jeffrey B. Berlin, Jorun B. Johns y Richard H. Lawson (Edition Atelier, 1993). Los pasajes claves de la última correspondencia de los dos hombres se citan en «Stefan Zweig and is American Publisher: Notes on an Unpublished Correspondence, with reference to Shachnovelle and Die Welt von Gestern», en Deutsche Vierteljahrs Schrift für Litraturwissenschaft und Geistesgeschichte, (J.B. Metzler Verlag, 1982). También consulté la correspondencia no publicada entre Benjamin Huebsch y Stefan Zweig, archivada en los documentos de Benjamin W. Huebsch en la Biblioteca del Congreso. Stefan Zweig: Briefe 1933-1942, Herausgegeben von Knut Beck und Jeffrey B. Berlin (S. Fischer, 2005), el volumen final de una serie de múltiples libros con las cartas escogidas de Zweig, fue importantísimo para mi investigación, y un cierto número de citas de mi libro se han extraído de esta antología. La correspondencia entre Zweig y Joseph Roth se ha recogido de una forma muy vibrante en Joseph Roth: A Life in Letters, traducido y editado por Michael Hofmann, (W.W. Norton & Company, 2012).

 

 

PUBLICACIONES DE ZWEIG

 

Entre las obras publicadas de Zweig, las más importantes para este libro fueron Erasmo de Rotterdam, traducido al inglés por Eden y Cedar Paul, (The Viking Press, 1934) [Erasmo de Rotterdam. Triunfo y tragedia de un humanista. Paidós, Barcelona, 2011. Traducción de Rosa S. Carbó], Kaleidoscope: Thirteen Stories and Novelettes (Caleidoscopio: trece historias y novelas cortas) traducidos al inglés por Eden y Cedar Paul, (The Viking Press, 1934). Jewish Legends (Leyendas judías) traducido por Eden y Cedar Paul, (Marrkus Wiener Publishing Edition, 1987). Émile Verhaeren, traducido por Jethro Bithell (Constable and Company, 1914). The Struggle with the Daemon: Hölderlin, Kleist, Nietzsche, traducido por Eden y Cedar Paul, (Pushkin Press, 2012) [La lucha contra el demonio: Hölderlin, Kleist, Nietzsche, Acantilado, Barcelona, 2013, traducción de Joaquín Verdaguer], Mental Healers: Franz Anton Mesmer, Mary Baker Eddy, Sigmund Freud, traducido por Eden y Cedar Paul, (Viking Press, 1932) [La curación por el espíritu: Franz Anton Mesmer, Mary Baker Eddy, Sigmund Freud, Acantilado, Barcelona, 2007. Traducción de J. Fontcuberta]; Joseph Fouché, traducido por Eden y Cedar Paul (Viking Press, 1930) [Fouché, retrato de un hombre político. Acantilado, Barcelona, 2011. Traducción de Carlos Fortea], Beware of Pity, traducido por Phyllis and Trevor Blewitt, (Pushkin Press, 2003) [La piedad peligrosa. Debate, Barcelona, 2002. Traducción de Carlos Fortea]; Twenty-four Hours in the Life of a Woman y The Royal Game, traducido por Anthea Bell, (Pushkin Press, 2003) [Veinticuatro horas en la vida de una mujer, Acantilado, Barcelona, 2004, traducción de María Daniela Landa] y [Novela de ajedrez, Acantilado, Barcelona, 2006, traducción de Manuel Lobo]. The Invisible Collection (La colección invisible) y Buchmendel , traducido por Eden y Cedar Paul, (Pushkin Press, 1998) [Mendel, el de los libros, Acantilado, 2009, traducción de Berta Vías Mahou]. La versión que cito de Letter from an Unknown Woman es la traducción de Jill Sutcliffe, antologada en Stefan Zweig, The Burning Secret and other stories (E.P. Dutton, 1989) [Carta de una desconocida, Acantilado, Barcelona, 2014, traducción de Berta Conill]. Mis citas de Marie Antoinette: Portrait of an Average Woman son de la traducción de Cedar Paul y Eden Paul (The Viking Press, 1933) [María Antonieta, Acantilado, Barcelona, 2012, traducción de Carlos Fortea]. He usado tanto la edición de 1943 de Viking Press de Brazil: Land of the Future (Brasil, país de futuro) como la reciente traducción de Lowell A. Bangerter publicada por Ariadne Press en 2007 [Brasil, país de futuro, Capitán Swing, Madrid, 2012. Traducción de Alfredo Cahn].

 

 

MEMORIAS, BIOGRAFÍAS Y RECUERDOS

 

A pesar de todas sus distorsiones y omisiones, la memoria-biografía de Friderike Zweig de su marido, Stefan Zweig (Thomas Y. Crowell Company, 1946) [Destellos de vida. Memorias de Friderike Zweig, Papel de liar, Barcelona, 2009, traducción de Pablo Álvarez] sigue siendo una obra importante y a menudo muy atractiva. Leída en paralelo con otros relatos más escrupulosos, proporciona una enorme cantidad de datos sobre el carácter de Zweig. También hice gran uso de recuerdos escritos por otras personas que conocían a Zweig, en particular, los artículos contenidos en Stefan Zweig: A Tribute to His Life and Work, traducido por Christobel Fowler, editado por Hanns Arens (W.H. Allen, 1951). Der große Europäer: Stefan Zweig, editado por Hanns Arens, (Kindler Verlag, 956), es una gran antología conmemorativa, y fue la fuente que utilicé para los agudos artículos sobre Zweig de Joachim Maas, Klaus Mann, Thomas Mann e Irmgard Keun.

Estoy en deuda con la obra de muchos estudiosos y biógrafos cuyo trabajo de documentación e ideas interesantes han dado color a mi narración, y han ayudado a dar forma a mi propia perspectiva a lo largo de todo este libro. La excelente European of Yesterday: A Biography of Stefan Zweig (Londres: Oxford University Press, 1972) de Donald Prater ha sido un recurso muy valioso, especialmente por el enorme número de cartas que va resumiendo en su texto. Cualquier lector interesado en toda la trayectoria de la historia de Zweig debería buscar ese libro, lamentablemente difícil de encontrar. Three Lives: A Biography of Stefan Zweig de Oliver Matuschek, traducido por Allan Blunden (Pushkin Press, 2011) apareció mientras escribía este libro, y proporciona una enorme cantidad de material biográfico nuevo y aproximaciones crítica a la historia de Zweig. Prater aprovechó sus conversaciones y su relación con Friderike Zweig, pero también se vio limitado por ellas. El libro de Oliver está libre de ese sesgo, y ofrece un retrato de la vida de Zweig que es ejemplar por su objetividad y su amplitud. Pero mucho antes de que apareciera el libro, yo ya me había beneficiado del apoyo erudito de Oliver, que nunca me escatimó. Él me encaminó hacia muchas fuentes a las que de otro modo no habría tenido acceso, y mi gratitud hacia sus conocimientos y su generosidad es enorme.

La contribución de Eva Altmann a mi comprensión de la historia de Stefan y Lotte Zweig es evidente en todo mi libro. Aparte incluso de los recuerdos que ella compartía y las interpretaciones que ofrecía, su insistencia en recordar la lucha del exilio, que se extiende antes y más allá de la historia de Zweig (una lucha que continúa hoy en día, y que implica a todos lo que tenemos la suerte de tener un hogar) fue una inspiración fundamental para mí, a la hora de escribir este libro.

 

 

REFERENCIAS POR CAPÍTULOS

 

Las citas que siguen no pretenden ser exhaustivas, pero me he esforzado por dejar claro lo mucho que debe este libro al trabajo de otros, indicando las fuentes más importantes que se hallan detrás de mis citas y mis argumentos, y proporcionar a los lectores interesados una guía para poder acercarse a las fuentes.

 

 

Introducción

 

Al principio de la introducción, recurrí a Stefan and Lotte Zweig’s South American Letters de Davis y Marshall para las citas y la atmósfera general. La nota sobre Montaigne del diario de Zweig la cita Prater, igual que la observación que hizo Zweig a André Maurois sobre el proceso del exilio. Zweig escribe sobre la traducción de Austria a un lenguaje tropical en una carta a Franz y Alma Werfel en Stefan Zweig: Briefe 1932-1942 de Beck y Berlin. El patriotismo austríaco de Joseph Roth se describe en la biografía de Zweig de Friderike. La observación de Jules Romains sobre el domicilio de Zweig en Ossining es de su artículo «Derniers Mois Et Dernières Lettres de Stefan Zweig», que apareció en La Revue de Paris, 62e année, 2 feb. 1955, y es una fuente importante para mi libro. Los comentarios de Klaus Mann sobre su encuentro con Stefan Zweig en las calles de Nueva York, en su obra autobiográfica, se mencionan en la autobiografía de Mann, The Turning Point (L.B. Fischer, 1942) [Cambio de rumbo: crónica de una vida, Alba, Barcelona, 2007, traducción de Genoveva y Antón Dieterich] y hay una descripción más completa en su artículo «Er war ein Verzweifelter», en Arens, Der große Europäer: Stefan Zweig. The Turning Point es también la fuente para la historia sobre la respuesta de Zweig al voto de 1930 en el Reichstag. El relato de Carl Zuckmayer sobre su vida en Vermont y la comida con Zweig se han tomado de sus memorias, A Part of Myself: Portrait of an Epoch, traducido por Richard y Clara Winston (Harcourt Brace Jovanovich, Inc., 1970) [Como un trozo de mí mismo, Aguilar, Madrid, 1972, traducción de Miguel Chamorro], y el artículo de Zuckmayer «Did You Know Stefan Zweig?» en Arens. Las citas de Bruno Walter son de Theme and Variations: An Autobiography de Bruno Walter, traducido por James A. Galston (Alfred A. Knopf, 1946). La cita de Heinrich Mann se ha tomado del excelente The Culture of Defeat: On National Trauma, Mourning an Recovery, de Wolfgang Schivelbusch, traducido por Jefferson S. Chase (Picador, 2004), que me ayudó en diferentes ocasiones en la escritura de este libro. Recibí información de la casa de Zweig y el entorno de Ossining de los archivos y los amables conservadores de la Sociedad Histórica de Ossining. La frase sobre el «típico enamoramiento de Estados Unidos» es de Maurice R. Davie, Refugees in America: Report of the Committee for the Study of Recent Immigration from Europe, Yale University Press, 1947. Los comentarios de Max Brod sobre el piso de soltero de Zweig, tomados de su trabajo Erinnerungen au Stefan Zweig en Der große Europäer, de Arens, están traducidos en la biografía de Matuschek. La atmósfera del piso de la calle Hallam de Zweig y la «vida intermedia» la describió Hilde Spiel en sus elocuentes memorias, The Dark and the Bright, traducidas por Christine Shuttleworth, (Ariadne Press, 2007). Richard Friedenthal afirma que Zweig se consolaba con el espíritu de otros famosos exiliados del pasado en su conferencia «Stefan Zweig and Humanism», en Arens. La decisión de Zweig de encontrar en Piccadilly Circus el eje del mundo se relata en la conferencia de despedida de Jules Romains en París, en 1939, sobre Zweig, Stefan Zweig: Great European, traducido por James Whitall, (The Viking Press, 1941). El comentario de Gershom Scholem sobre los escritores germano-judíos es de su conferencia «Jews and Germans», recogida en la antología On Jews and Judaism in Crisis, editado por Werner J. Dannhauser (Paul Dry Brooks, 2013). Estoy en deuda con el profundo conocimiento de Viena de Christian Witt Dörring, por su ayuda para descifrar el significado del medallón de la estatua de Schiller, un proceso facilitado por Michael Huey, siempre servicial y perspicaz.

 

 

Capítulo uno

 

Para mi descripción de la fiesta he consultado las cartas de Zweig a la familia de Lotte, un diario no publicado de Lotte, que Oliver Matuschek amablemente compartió conmigo, y el artículo de Zweig «The Spirit of New York», que descubrí en traducción sueca en el Stockholm Dagblad, 20 de diciembre de 1926. Monica Löfgren me tradujo el artículo. Klaus Mann también describe el comportamiento de Zweig en la fiesta en «Er war ein Verzweifelter», en Arens Der große Europäer: Stefan Zweig. La observación sobre el creciente número de refugiados, situación que hacía cambiar la perspectiva sobre ellos, se cita en The Refugee Intellectual: The Americanization of the Immigrants of 1933-1945 de Donald Peterson Kent, (Columbia University Press, 1953). Zweig se queja del número de gente a la que tiene que ayudar en Nueva York en numerosos sitios. Las citas que introduzco aquí las he extraído de su correspondencia con Friderike. Mi fuente principal a la hora de hablar de la colección de partituras musicales de Stefan Zweig en sus últimos años ha sido Music in Stefan Zweig’s Last Years: Some Unpublished Letters, una monografía de Harry Zohn publicada en The Julliard Review (primavera, 1956). Las observaciones sobre la permeabilidad de las fronteras entre clases en Viena, la capacidad de Zweig de crear una atmósfera literaria allí donde fuese y la típica multiplicidad de Viena derivan de «Victims of Fascism: Stefan Zweig», de Klaus Mann, en Free World (abril, 1942). Walter Bauer informa de las observaciones de Zweig sobre la vida del espíritu en su artículo «Stefan Zweig the European» en Arens. Los comentarios de Zweig sobre Salzburgo son del artículo «Salzburg: The Framed Town», recogido en Stefan Zweig Journeys, traducido al inglés por Will Stone, (Hesperus Press Limited, 2010). Para su estado de ánimo en Nueva York, me he apoyado mucho en artículos periodísticos de la época, como «Says Spies Infest Forts in City Area», The New York Times, 3 de junio de 1941; «Says Bund Mapped Wall St. Hangings», The New York Times, 4 de octubre de 1940, y «22,000 Nazis Hold Rally in Garden; Police Check Foes», The New York Times, 21 de febrero de 1939, todos de Henry N. Dorriss. Las observaciones de Charles Baudouin y la correspondencia entre Zweig y Erich Ebermayer sobre el cambio interior y el deseo de contrapeso se citan en Prater, que también —quizá a través de informaciones recibidas de Friderike— revela que Zweig estaba recibiendo un tratamiento hormonal antienvejecimiento en Nueva York. Zuckmayer habla de sus conversaciones con Zweig y del descubrimiento por su parte de las tierras vírgenes americanas en sus memorias. Las observaciones sobre la cabeza de Zuckmayer y su facilidad para contar historias vienen de Elias Canetti, The Play of the Eyes, traducido por Ralph Manheim (Farrar Straus, Giroux: 1986) [El juego de ojos, El Aleph, Barcelona, 1985, traducción de Andrés Sánchez Pascual]. Me ayudó mucho a comprender la relación de los exiliados con el campo americano, así como muchos otros aspectos de su respuesta al Nuevo Mundo, la maravillosa obra Exiled in Paradise (The Viking Press: 1983) de Anthony Heilbut. Para obtener más información general sobre la época, también consulté a Helmut F. Pfanner, Exile in New York: German and Austrian Writers after 1933 (Wayne State University Press, 1983). La anécdota que cuenta Thomas Mann de la caridad de Zweig aparece en su artículo «Stefan Zweig zum zehnten Todestag 1952», en Arens, Der große Europäer: Stefan Zweig.

Katja Guttman me ayudó a traducir este artículo, junto con la carta de Zweig a Paul Zech del 5 de junio de 1941 que se cita en Beck y Berlin, Stefan Zweig: Briefe 1932-1942. Para el festival de Salzburgo de 1933 véase, por ejemplo, «Salzburg Idolizes Bruno Walter, Ousted by Nazis as ‘Non-Aryan’», The New York Times, 4 de agosto de 1933; y «Austrians Indignant», The New York Times, 31 de julio de 1933 de Frederick T. Birchall. La comparación que hace Zweig de los refugiados con Odiseo la cita Robert Van Gelder en «The Future of Writing in a World at War», The New York Times, 28 de julio de 1940. La cita anónima sobre la Odisea sin dioses aparece en «The Exiled Writers», de Benjamin Appel en The Saturday Review of Literature, 19 de octubre de 1940.

El análisis que hace Hannah Arendt de los «vagabundos-Ulises» proviene de su texto «We Refugees», reimpreso en Hannah Arendt, The Jewish Writings, editado por Jerome Kohn y Ron H. Feldman, (Schocken Books, 2007). Todas las citas de Martin Gumpert son de sus notables memorias, First Papers, traducidas por Heinz y Ruth Norden, (Duell, Sloan & Pearce, 1941). La broma de Zweig sobre ser capaz de permitirse el exilio se cita en el muy informativo Journey of No Return: Five German-speaking Literary Exiles in Britain, 1933-1945 (Libris, 2000) de Richard Dove, que incluye fragmentos sobre diversas conversaciones entre Zweig y Rolland que también fueron muy importantes para mi libro. Brecht se burla de lo absurdo de la oficina consular en su drama Conversations in Exile. La cita de Gustav Anders se reproduce en Alan D. DeSantis, «Caught Between Two Worlds: Bakhtin’s Dialogism in the Exile Experience», Journal of Refugee Studies, Vol. 14, N.º 1, 2001. La carta de Zweig a Jules Romains sobre la fuente de la juventud aparece en «Derniers Mois Et Dernières Lettres de Stefan Zweig» de Romains. Lo que dice Hans Natonek sobre el hecho de que Manhattan es el alfabeto americano son de sus maravillosas memorias (por desgracia, casi imposibles de encontrar) In Search of Myself (G.P. Putnam’s Sons, 1943). La cita de Claude Lévi-Strauss —junto con las observaciones de Lévi-Strauss en el capítulo dos— proceden de su artículo «New York in 1941», incluido en la colección The View from Afar, traducido por Joachim Neugroschel y Phoebe Hoss (The University of Chicago Press, 1985).

 

 

Capítulo dos

 

Los comentarios de Zweig sobre la escena de la Metropolitan Opera se citan en Matuschek. Tanto la acusación de epicureísmo hacia Zweig (por parte de Ludwig Marcuse) como la broma sobre Reichner están tomadas de la correspondencia con Joseph Roth en Joseph Roth: A Life in Letters de Hoffmann. El relato completo de la conferencia de prensa de Stefan Zweig en Nueva York en 1935 se puede encontrar en la web de la Jewish Telegraphic Agency, en «Stefan Zweig Tells Plan for Review, Says Folks Don’t Trust Intellectuals», 31 de enero de 1935, de Henry W. Levy, http://www.jta.org/1935/01/31/archive/stefan-zweig-tells-planfor-review-says-folks-dont-trust-intellectuals. Brainin resume su propia respuesta a Zweig en la conferencia, en su posterior entrevista en la habitación del hotel con el autor, en «The Tragedy of Stefan Zweig», The National Jewish Monthly, abril de 1942, de Joseph Brainin. La observación de Zweig sobre los judíos que quedaron como rehenes en el interior de Alemania aparece en una carta que escribió a Joseph Leftwich, y que Leftwich cita en su complejo estudio, compuesto por múltiples capas, «Stefan Zweig and the World of Yesterday», Year Book III of the Leo Baeck Institute; East and West Library, Londres, 1958. El manifiesto incompleto de Zweig se reimprimió en el fascinante artículo de Berlin «The Struggle for Survival—From Hitler’s Appointment to the Nazi Book-Burnings: Some Unpublished Stefan Zweig Letters, with an Unpublished Manifesto.» Para contar la historia de la gira americana de los Zweig en 1938 me serví del diario no publicado de Lotte Zweig para ese periodo. Estoy en deuda con Oliver Matuschek por permitirme acceso a este documento, junto con su investigación sobre la correspondencia de los refugiados que solicitaban fondos a Zweig, para conseguir una mayor perspectiva sobre el asunto. Para la nueva encarnación del Cotton Club véase por ejemplo «Night Club Notes», The New York Times, 26 de septiembre de 1936. La entrevista de Curtiss con Zweig se relata en Thomas Quinn Curtiss, «Stefan Zweig», Books Abroad, Vol. 13, N.º 4 (otoño de 1939). Zweig escribe a Hanna y Manfred, así como a Friderike, sobre la escena en New Haven. La cita de Natonek sobre el pánico de la experiencia del refugiado viene de su artículo «The Last Day in Europe», reimpreso en Hitler’s Exiles: Personal Stories of the Flight from Nazi Germany to America, editado por Mark M. Anderson, (The New Press: 1998). Todas las demás citas de Natonek se han extraído de sus memorias. La observación de Zweig sobre gente «de segunda fila» procede de una carta a Rolland citada en Dove. Su comparación de los refugiados con perros es una conferencia no publicada de Prater, archivada en SUNY Fredonia. La cita de Feuchtwanger es de su artículo «The Grandeur and Misery of Exile», reimpreso en Anderson. Sobre el repunte de los delitos en Nueva York véase por ejemplo «Big Rise in Crime is Reported Here», The New York Times, 12 de noviembre de 1940. Las citas de Camus son de su artículo de 1947 «The Rains of New York», reimpreso en Albert Camus, Lyrical and Critical Essays, traducido por Ellen Conroy Kennedy; editado por Philip Thody (Vintage, 1970). El fascinante artículo de Erich Kahler, «Collectividualists», se publicó en la edición especial de la Saturday Review of Literature dedicada a los escritores exiliados, publicada el 19 de octubre de 1940. La ocurrencia de Brecht de que el auténtico trabajo del exilio es la esperanza está citada en Heilbut. La observación de Hilde Spiel sobre la América auténtica es de su novela The Darkened Room, (Methuen & Co. Ltd, 1961).

 

 

Capítulo tres

 

El comentario de Zweig de que los libros son mejor compañía que las personas aparece en una carta a Friderike. El extraordinario libro de Victor Klemperer, The Language of the Third Reich: LTI — Lingua Tertii Imperii, traducido por Martin Brady, (Continuum, 2006) [LTI: la lengua del Tercer Reich. Apuntes de un filólogo, Minúscula, Barcelona, 2001, traducción de Adán Kovacsics] fue mi fuente para los comentarios sobre los libros que pertenecían a los judíos en la Alemania nazi, así como otras muchas ideas importantes para este libro. Una traducción inglesa realizada por Harry Zohn del artículo de Zweig «Thanks to Books», apareció en The Saturday Review el 8 de febrero de 1958. Fleischer transmite su experiencia de entrar en el piso de soltero de Zweig en un artículo commemorativo recogido en Stefan Zweig-Spiegelungen einer schöpferischen Persönlichkeit, editado por Erich Fitzbauer (Bergland Verlag, 1959). Las frases sobre el esbozo autobiográfico de Zweig en 1922 se citan en Matuschek, así como las citas de la carta de juventud de Zweig a Fleischer, y las observaciones de Fontana sobre Zweig como voyeur. La carta del escultor Ambrosi y las palabras de Zweig sobre la carencia de codicia sexual se citan en Prater, «Zweig and the Vienna of Yesterday», un artículo recogido en Turn-of-the-Century Vienna and its Legacy de Berlin, Johns y Lawson. Las notas no publicadas de Prater de una entrevista que llevó a cabo con Friderike son también el origen del comentario de Friderike de que Zweig no era ningún «donjuán». Según Prater, también Friderike dijo que el miedo a la locura de Zweig era el motivo por el que se había negado a tener niños, en el artículo «Stefan Zweig», recogido en Exile: The Writer’s Experience, editado por John M. Spalek y Robert F. Bell (The University of North Carolina Press, 1982.) En cuanto al aumento de los suicidios en Alemania y Austria, véase por ejemplo el interesante artículo de Darcy Buerkle «Historical Effacements: Facing Charlotte Salomon», recogido en Reading Charlotte Salomon, editado por Michael P. Steinberg y Monica Bohm-Duchen (Cornell University Press, 2006). El bonito estudio de Hilde Spiel sobre volver a Viena después de la guerra, Return to Vienna: A Journal, traducido por Christine Shuttleworth (Ariadne Press, 2011), fue mi fuente para su comentario de que se alegraba de que sus hijos crecieran en Inglaterra. La historia que explica Geiger de que Zweig rondaba el zoo como un exhibicionista aparece en su obra Memorie di un Veneziano, (Vallecchi, 1958). Los comentarios de Romains sobre el estilo interrogativo de Zweig y su confesión de pasiones violentas están contenidos en su obra Stefan Zweig: Great European. Las observaciones de Zweig sobre el fatalismo austríaco se citan en el importante artículo conmemorativo de Otto Zarek «Stefan Zweig-A Jewish Tragedy», en Arens. Las palabras de Klaus Mann sobre las modestas ambiciones de Zweig están tomadas de su artículo para Free World. Los comentarios de Friderike sobre el escaso margen que dejaba Zweig a los placeres personales, junto con su relato de su cortejo y su traslado a Salzburgo, proceden de sus memorias sobre Zweig. El comentario de Gombrich sobre los efectos paliativos de la música en el antisemitismo vienés se citan en Strangers at Home and Abroad: Recollections of Austrian Jews who Escaped Hitler, traducido por Ewald Osers, editado por Adi Wimmer, (McFarland & Company, Inc., 2000). La atmósfera antisemita de Viena en torno a las vacaciones de Navidad aparece en Karl Lueger: Mayor of Fin de Siècle Vienna (Wayne State University Press, 1990) de Richard S. Geehr. Las escenas de insultos en el parlamento vienés se relatan en un esclarecedor estudio de George E. Berkley, Vienna and its Jews: The Tragedy of Success, 1880-1980s, (Madison Books, 1988). La referencia más exhaustiva al linaje judío de Zweig la proporciona Leo Spitzer en Lives in Between: Assimilation and Marginality in Austria, Brazil, West Africa 1780-1945 (Cambridge University Press, 1989). Leftwich cita la entrevista con David Ewen en la cual Zweig decía que siempre había estado interesado vitalmente en los problemas judíos.

 

 

Capítulo cuatro

 

Carl E. Schorske, en Fin-de-Siècle Vienna: Politics and Culture (Vintage Books, 1981), proporciona una indispensable introducción a la extraña ola de producción estética febril y privación de derechos políticos en Viena que tanto influyeron en Zweig y sus coetáneos. He usado la traducción de Michael Ford del Mein Kampf de Hitler en todo el texto (Elite Minds, Inc., 2009). La nota de Alfred Zweig sobre el hecho de que los amigos de su familia eran la burguesía judía de primer rango se cita en Matuschek. Zweig exploró la analogía entre la historia y una alcachofa en una charla que compuso sobre el tema de «History as an Artist», programado para la conferencia del PEN de Estocolmo en 1939, pero que se canceló al estallar la guerra. Friderike cita la descripción que hizo Zweig de los libros como «un puñado de silencio» en la biografía que escribió de él. Zweig compara el acto de escribir con el opio y el hachís en una carta posterior a Wittkowski, citada por Prater en su artículo en Exile: The Writer’s Experience de Spalek y Bell. Las cartas de Zweig sobre valorar la paz y la tranquilidad, junto con su importante carta a Schickele en 1934, se citan en Prater. La respuesta de Forster al Erasmo de Zweig se puede encontrar en The B.B.C. Talks of E.M. Forster, editado por Morgan Forster (University of Missouri Press, 2008). Sobre la respuesta americana a Erasmo, véase, por ejemplo, Percy Hutchison, «Stefan Zweig’s Life of Erasmus», The New York Times, 4 de noviembre de 1934. Irving Howe usa la frase sobre las «virtudes de la impotencia» en relación con la literatura yiddish en la introducción a A Treasury of Yiddish Stories, que editó Howe con Eliezer Greenberg, (Viking, 1954). Las observaciones de Gustinus Ambrosi sobre Zweig como «eterno peregrino de la psique humana» se citan en «The Burning Secret of Stephen Branch, or A Cautionary Tale About a Physician Who Could Not Heal Himself» de Harry Zohn en Stefan Zweig: The World of Yesterday’s Humanist Today, Proceedings of the Stefan Zweig Symposium, editado por Marion Sonnenfeld (State University of New York Press, 1983). Werfel informa del momento en que Zweig se puso pálido ante la mención de la venganza en su artículo conmemorativo «Stefan Zweig’s Death», publicado en Arens. La cita sobre Jungfolk es del fantástico libro de Erika Mann School for Barbarians, traducido por Muriel Rukeyser, (Modern Age Books, 1938). El relato de Mann de la transformación completa que llevó a cabo Hitler del sistema educativo alemán es esencial para comprender cómo ocurrió el fenómeno nazi. Mis citas del primer artículo de Zweig sobre Herzl y su intercambio de cartas con Martin Buber están sacados del excelente artículo «Autobiography as Farewell I», de Michael Stanislawski, en su colección Autobiographical Jews: Essays in Jewish Self-Fashioning (University of Washington Press, 2004). Las observaciones de Kraus sobre el sionismo se citan en Karl Kraus de Harry Zohn (Twayne Publishers, Inc., 1971). Las palabras de Zweig sobre la sagrada misión de los judíos aparecen en su estudio sobre Romain Rolland en el capítulo «The Jews», que forma parte del análisis que hace Zweig del Jean Christophe de Rolland. Zarek informa del incidente en el Museo de Múnich en Arens.

 

 

Capítulo cinco

 

Zelda Fitzgerald hablaba del olor a malvavisco del Biltmore en una carta a Scott en verano de 1930. Entre las diversas narraciones de la velada del PEN que consulté, se encuentran «1,000 Authors Here Defy Nazi Power», The New York Times, 16 de mayo de 1941, y una versión en lengua alemana del discurso de Zweig publicada en el Aufbau el 16 de mayo de 1941, que Katja Guttman me ayudó a traducir.

Klemperer explica el incidente de Tácito glosado por Scherer en The Language of the Third Reich (La lengua del Tercer Reich), que también contiene un análisis de las vicisitudes del término «fanatisch». Lo que dice Romains de la sensación de Zweig de que Alemania era su patria intelectual viene de su conferencia Stefan Zweig: Great European. El comentario de Scholem sobre la ilusión morbosa a la cual están sujetos escritores como Zweig aparece en su artículo «Walter Benjamin», reimpreso en On Jews and Judaism in Crisis de Dannhauser. La afirmación de Zweig de lo «razonable» del elemento eslavo en el carácter austríaco se la hizo a Ernst Feder, tal y como se informa en el artículo de Feder «Stefan Zweig’s Last Days», en Arens. Sobre la voz de Hitler, véase por ejemplo I Knew Hitler (Charles Scribner’s Sons, 1937) de Kurt G. Ludecke, y «Hitler at the Top of his Dizzy Path», The New York Times, 5 de febrero de 1933, de Emil Lengyel. Los comentarios de Ernst Kris sobre los lemas de Hitler aparecen en el artículo «Expert Analyzes Nazi Propaganda», The New York Times, 8 de diciembre de 1940. Las palabras de Viertel sobre el estilo latino de Zweig vienen de su artículo «Farewell to Stefan Zweig», en Arens.

Las observaciones de Amelia von Ende sobre la raza vienesa aparecen en su artículo «Literary Vienna», publicado en The Bookman, octubre de 1913. La entrevista de Arendt con Günter Gaus, que tuvo lugar el 28 de octubre de 1964, se puede encontrar en la colección de Arendt Essays in Understanding: 1930-1954, editado por Jerome Kohn (Harcourt Brace & Co., 1994). Hilde Spiel describe la escena de la fiesta de refugiados del Upper West Side en The Darkened Room. He consultado el emotivo relato de Dove sobre la odisea de los refugiados en Gran Bretaña para ver las experiencias que vivió Zweig allí en un contexto más amplio, y el libro de Dove ha sido también mi fuente para la carta a Felix Braun en la cual Zweig habla de ser un judío sin fe religiosa. El momento en que Anna Freud y Miriam Beer-Hoffman-Lens están juntas admirando la prosa de Zweig en el funeral de Freud se relata en Anna Freud: A Biography (Sheridan Books, 2008) de Elisabeth Young-Bruehl. La edición del diario de Stefan Zweig que he usado en todo el libro es Stefan Zweig, Tagebücher (S. Fischer Verlag, 1984). Las anotaciones que cito de la época de Zweig en Bath estaban escritas originalmente en inglés.

 

 

Capítulo seis

 

La queja de los jóvenes refugiados por la ausencia de cafés adecuados en América se puede encontrar en Today’s Refugees, Tomorrow’s Citizens: A Story of Americanization de Gerhart Saenger (Harper & Brothers, 1941). La observación de Zweig sobre el movimiento constante de Nueva York, tan ajeno al espíritu del café, aparece en «The Spirit of New York.» Los comentarios de Fritz Wittels sobre el café vienés son de Freud and the Child Woman: The Memoirs of Fritz Wittels, editado por Edward Timms (Yale University Press, 1994). Zarek explica que Zweig y Trotsky coincidieron en el Café Central. La carta de Ebermayer se cita en Prater. Las descripciones del confetti nazi ante el Hotel Regina proceden de Hilda Doolittle, Tribute to Freud: Writing on the Wall — Advent (New Directions Books, 1974) [Tributo a Freud, El Cobre, Barcelona, 2004, traducción de Alejandro Palomas]. Inside Europe de John Gunther (Harper & Brothers, 1938), de la que tomé las bromas populares sobre la estatura disminuida de Austria, ofrece un atractivo relato de un testigo presencial de los acontecimientos ocurridos en Austria en los años treinta. Spiel extrajo la analogía histórica entre febrero de 1934 y la Guerra Civil española en The Dark and the Bright. Las escenas que implicaban a Canetti, Broch y Zweig se han sacado de El juego de ojos de Canetti. La descripción de los esfuerzos de John Gunther por leer noticias de Viena mientras estaba en Viena en el Café Imperial vienen de su intenso artículo «Dateline Vienna», publicado en Harper’s Magazine, julio de 1935. Interwar Vienna: Culture Between Modernity and Tradition, editado por Deborah Holmes y Lisa Silverman, (Camden House, 2009), fue para mí otra referencia significativa a la hora de pensar en este periodo. El artículo de Karl Kraus «The Demolished Literature», en el cual aparece la descripción de los moradores del Café Griensteidl, se incluye en la valiosa antología The Viennese Coffeehouse Wits: 1890-1938, traducida y editada por Harold B. Segal (Purdue University Press, 1995). La descripción que hace Kraus de Zweig y Ludwig como «elevadores de cultura» aparece en su artículo «Pretiosen», de la edición de junio de 1926 de Die Fackel. La broma sobre el hecho de que el semitismo ganara importancia en Viena después de que los judíos se hicieran cargo de él se relata en Berkley. La propaganda de Zweig de tiempos de guerra, junto con la propaganda de sus coetáneos vieneses, se resume en Karl Kraus: Apocalyptic Satirist, Culture and Catastrophe in Habsburg Vienna de Edward Timms (Yale University Press, 1986) [Karl Kraus, satírico apocalíptico, Machado, Madrid, 1990, traducción de Jesús Pérez Martín]. Las observaciones de Musil sobre Kraus se citan en el intercambio de cartas entre Walter Kaufman y Erich Heller en The New York Review of Books, 9 de agosto de 1973. La descripción de Roth de la derrotada generación de la guerra aparece en su novela The Emperor’s Tomb (La tumba del emperador), traducida por John Hoare, (Overlook Press, 2002). El relato del regreso de Hitler al Imperial es de Heil! And Farewell de Pierre J. Huss (Herbert Jenkins Limited, 1943).

 

 

Capítulo siete

 

Mi fuente principal para las cavilaciones de Zweig para ver dónde establecerse han sido cartas a Huebsch y a la familia de Lotte. Parte de la información del entorno del hogar de los Van Loon y la experiencia de los refugiados vienen de la historia que escribió sobre su perfil Robert Van Gelder, «Van Loon, the Man Who Can’t Say No», publicado en The Milwaukee Journal el 14 de mayo de 1941. Van Loon escribe sobre las visitas de Zweig a Long Island Sound y sus esfuerzos para encontrarle un hogar a Zweig en su correspodencia con Ben Huebsch. Los capítulos introductorios de Refugees in America: Report of the Committee for the Study of Recent Immigration from Europe de Davie sigue siendo el mejor resumen de la rapidez con la que influyeron los acontecimientos en países bajo la influencia de Hitler en la política internacional hacia los refugiados. Ese volumen es también mi fuente principal sobre la «campaña de difamación» montada contra los grandes almacenes de Estados Unidos, y algunos de los informes sobre la ansiedad económica a gran escala que originaron los refugiados. Este último tema también está cubierto en The Refugee Intellectual: The Americanization of the Immigrants of 1933-1945 de Saenger y Donald Peterson Kent, (Columbia University Press, 1953). Los tres libros contienen muchos casos conmovedores. La historia que cito sobre el delineante de Pittsburgh procede de Kent. Para unos antecedentes generales del movimiento judío en el exilio, en relación con Estados Unidos, véase también No Haven for the Oppressed: United States Policy toward Jewish Refugees, 1938-1945 de Saul S. Friedman (Wayne State University Press, 1971). Las observaciones de Klaus y Erika Mann sobre las experiencias de los refugiados proceden de su trabajo en colaboración Escape to Life (Houghton Mifflin Company, 1939). Lo que relata Desmond Flowers de la respuesta de Zweig a la caída de Francia se cita en una conferencia sin publicar de Prater, «Stefan Zweig». Las estadísticas de niños como refugiados y víctimas del Holocausto se han tomado del interesante estudio What Happened to the Children who Fled Nazi Persecution de Gerhard Sonnert y Gerald Holton (Palgrave Macmillan, 2006). Leftwich cita el discurso de Zweig en un acto para recaudar fondos en Brasil para los judíos víctimas de la guerra, en el cual Zweig deja bien claro que piensa que la supervivencia carece de mérito. La huida de Zweig de Inglaterra en busca de la «alegría latina» la relata Romains en su conferencia de 1939. Mi principal fuente para las impresiones de la vida de los refugiados en Sanary en torno a Aldous Huxley y Thomas Mann fue Aldous Huxley: A Biography de Sybille Bedford (Alfred A. Knopf/Harper & Row, 1971). La lectura errónea que hizo Zweig de los resultados electorales de 1930 y la respuesta de Mann se recogen en Cambio de rumbo de Mann. Se encuentran más detalles del viaje de Zweig a Cap d’Antibes, aparte de los que describe Friderike en su biografía, en el artículo que escribió sobre Zweig y que apareció en la antología Greatness Revisited (Branden Press, 1971), una colección editada por Harry Zohn. La copia mecanografiada de Friderike de la carta de amor de Lotte a Stefan está archivada en Fredonia. Estoy en deuda con Oliver Matuschek por la idea de que Zweig empieza a identificar Lotte con Londres en la primera fase de su romance. La anécdota de Alfred Polgar sobre la distancia de Ecuador se cita en Escape to Freedom de Erika y Klaus Mann.

 

 

Capítulo ocho

 

Estoy muy agradecido a Norm Macdonald, presidente de la Asociación Histórica de Ossining, por responder una serie de preguntas sobre la vida en Ossining durante el periodo en que los Zweig estaban allí, así como de la situación general de la ciudad en los años treinta y cuarenta. También he usado Ossining Remembered, una monografía de «Images of America Society» producida por la Asociación Histórica de Ossining (Arcadia Publishing, 1999). Saqué detalles de los sonidos y las imágenes de Ossining en 1941 y 1943 de un artículo de Sally Walsh, «War Comes to Main Street», publicado en The Intelligencer en mayo de 1944. El tema del asombro de los refugiados por la abundancia de comida en Estados Unidos aparece en muchos textos. Sobre todo me he fijado en Davie, Kent y Saenger. El fascinante artículo de Zweig «The Monotonization of the World», publicado por primera vez en el Berliner Börsen-Courier el 1 de febrero de 1925, se ha recogido en The Weimar Republic Sourcebook, editado por Anton Kaes, Martin Jay y Edward Dimendberg (University of California Press, 1994). La batalla de los cómics y el hijo que reprocha a su padre inmigrante su antiamericanidad, así como las expresiones de la diferencia entre europeos y americanos en temas como el arte y la educación, aparecen en Kent. El atractivo artículo de Ise Gropius se ha reimpreso en Davie. Las observaciones de Auden en el sentido de que los americanos parecen niños grandes se puede encontrar en The Dyer’s Hand and Other Essays de W.H. Auden (Vintage Books/Random House, 1990) [La mano del teñidor y otros ensayos, Barral Editores, Barcelona, 1974, traducción de Mirko Lauer y Abelardo Oquendo]. La descripción de los niños como el «caballo de Troya» de las familias refugiadas aparece en Mary Treudley, «Formal Organization and the Americanization Process, with Special Reference to the Greeks of Boston», American Sociological Review (febrero de 1949). Saenger informa del caso de un padre que quiere que su hijo americanizado se convierta en su relaciones públicas. El análisis que hace Henry Pachter del problema del sistema educativo americano se puede encontrar en su artículo «A Memoir» recogido en The Legacy of the German Refugee Intellectuals, editado por Robert Boyers (Schocken Books, 1972). La carta de Zweig a Rolland sobre querer convertirse en una «autoridad moral», se cita en Prater. La historia de los ocupantes ilegales del Kapuzinerberg, y la respuesta de Zweig a su presencia, se relata en la biografía de Stefan escrita por Friderike. «The Glass-Enclosed Record of a Mind» de Virgilia Sapieha, una crítica de El mundo de ayer, apareció en The New York Herald Tribune el 18 de abril de 1943. La anécdota en la que aparecen Zweig, Roth y Keun observados por Hermann Kesten la relata Michael Hofmann en Joseph Roth: A Life in Letters. La crítica esencial de Arendt «Stefan Zweig: Jews in the World of Yesterday», se ha reimpreso en The Jewish Writings de Kohn y Feldman. Los comentarios de Zweig sobre los niños empobrecidos y los especuladores de la guerra se discuten en el sugerente artículo de Lionel B. Steiman «The Worm in the Rose: Historical Destiny and Individual Action in Stefan Zweig’s Vision of History», de The World of Yesterday’s Humanist Today de Sonnenfeld. Walter Bauer cita extensamente la conferencia de Zweig en el Congreso Volta en su artículo «Stefan Zweig the European», en Arens. Friderike también cita parte del discurso en su biografía de Stefan. Para una introducción del papel fundamental de las teorías estéticas de Wagner a la hora de moldear la política austríaca, junto con Schorske véase Dionysian Art and Populist Politics in Austria de William J. McGrath (Yale University Press, 1974). Agradezco mucho al Dr. Arturo Larcati que respondiera a todas mis preguntas sobre el Congreso Volta y me diera detalles útiles sobre la dominación alemana nazi y fascista italiana de ese acto en 1932.

 

 

Capítulo nueve

 

Consulté ediciones del Citizen Register de julio y agosto de 1941 (el principal periódico diario de Ossining en aquella época) para los aspectos generales de los acontecimientos en la ciudad durante la época en que los Zweig vivieron allí. La historia del último encuentro de Joachim Maass con los Zweig lo relata Maas en «Die Letzte Begegnung», en Der große Europäer de Arens. Eva Tuerbl me ayudó a traducir este artículo.

 

 

Capítulo diez

 

Los recuerdos de René Fülöp-Miller de las conversaciones con Zweig en Ossining están recogidos en su artículo «Memorial for Stefan Zweig» en Arens. Estoy muy agradecido a Adrian Christopher Liddell y Nicola Helen Liddell, junto con sus dos encantadoras y amables hijas, Eloise y Alexandra, por enseñarme la casa y el jardín de Rosemount. La dedicación con la cual la familia ha restaurado el jardín habría resultado enormemente conmovedora para Stefan y Lotte. Además de proporcionarme datos muy valiosos sobre la sociedad de Bath, los Liddell me enseñaron muchos documentos sobre la casa y el jardinero de Zweig que resultaron cruciales para mi investigación. Mis fuentes principales para las historias sobre Zweig, su jardín, los paseos por el campo de Bath y Edward Miller fueron Stefan Zweig: A Critical Biography, de Elizabeth Allday (J. Philip O’Hara, Inc., 1972); «Memories of Stefan Zweig», una carta de Robert Draper, publicada en Bath Chronicle (3 de marzo de 1997); y «Rosemount and Stefan Zweig», un artículo preparado por la Sociedad Histórica de Bath en conjunto con una exposición sobre la vida de Zweig montada por la sociedad en 1997. Werfel cita la carta de Zweig sobre lo de derrumbarse junto con los edificios bombardeados en su artículo «Stefan Zweig’s Death», en Arens. La carta de Thomas Mann a Friderike se puede encontrar en Letters of Thomas Mann: 1889-1955, traducido y editado por Richard y Clara Winston, (University of California Press, 1975). Las cartas de Zweig a Rolland sobre su frustración con Inglaterra se citan en Dove. La observación de Romains sobre el disgusto de Zweig con la solemnidad de las ciudades inglesas se cita en «Zweig and Wife, Refugees, End Lives in Brazil», un obituario publicado en The New York Herald Tribune, 24 de febrero de 1942.

 

 

Capítulo once

 

La contribución de Maria Wolfring a mi comprensión de la vida en Petrópolis, tanto durante la vida de Zweig allí como más tarde, fue enorme, y le estoy profundamente agradecido por su generosidad al enseñarme la ciudad y hablarme de la historia de su familia. Estoy muy agradecido a Kristinia Michahelles por haberme puesto en contacto con Maria, y por contestar muchas preguntas también por su parte sobre los Zweig y Petrópolis. Los comentarios de Feder sobre la popularidad de Zweig en Brasil aparecen en su artículo en Arens. La afirmación extasiada de Zweig de que se había convertido en Marlene Dietrich aparece en su correspondencia con Friderike.

 

 

Capítulo doce

 

El comentario de Zweig sobre derrumbarse como héroes homéricos en ruta hacia Brasil aparece en una carta a Huebsch. Prater escribe acerca de la recepción de los Zweig en Brasil, citando cartas e informes de sus amigos de allí. El artículo de Alberto Dines, «Death in Paradise», informa de las críticas al libro de Zweig en Brasil en el Correio da Manhã, así como de la respuesta de conocidos autores contemporáneos brasileños a la obra de Zweig. El artículo contiene una información muy valiosa y de vital importancia sobre el tiempo que pasó Zweig en Brasil, un relato que se puede encontrar completo en su libro, sin traducir, Morte no paraíso: a tragédia de Stefan Zweig (Círculo de Leitores, 1981). El artículo introductorio de Davis y Marshall, Stefan and Lotte Zweig’s South American Letters, proporciona también una visión excelente del paisaje político y cultural en los años de las visitas de Zweig, especialmente en referencia a los refugiados y la guerra. Para más información del trasfondo, consulté The Brazilian Reader: History, Culture, Politics, ed. Robert M. Levine y John J. Crocitti (Duke University Press, 1999); Father of the Poor? Vargas and His Era de Robert M. Levine (Cambridge University Press, 1998); Welcoming the Undesirables: Brazil and the Jewish Question de Jeffrey Lesser (University of California Press, 1995); «Ad perpetuam rei memoriam: The Vargas Regime and Brazil’s National Historical Patrimony, 1930-1945» de Daryle Williams (Luso-Brazilian Review, 2004); y «Vargas and the Destruction of the Brazilian Integralista and Nazi Parties» de Frank D. McCann, (The Americas, julio de 1969). Los comentarios de Zweig sobre la «vía contemplativa» aparecen en una carta a Hanna y Manfred. Las observaciones de Friedenthal sobre el manuscrito de Balzac aparecen en un epílogo a la edición de Zweig de Balzac que él editó, y que fue traducido por William y Dorothy Rose (The Viking Press, 1946). La carta de Zweig sobre la «cura de silencio» de Petrópolis, su redescubrimiento de Montaigne, y la incapacidad de compartir la alegría de los que celebraban el Carnaval, se reproducen en «Derniers Mois Et Dernières Lettres de Stefan Zweig» de Romains. Una copia mecanografiada de la carta no publicada a Viertel que aparece en diversos puntos de este capítulo se encuentra archivada con los documentos de Huebsch en la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos. Las palabras de Zweig sobre la destrucción de su mundo después de Pearl Harbor y el heroísmo de traducir al alemán son de una carta a Viktor Wittkowski citada en el artículo de Prater «Stefan Zweig», en Exile: The Writer’s Experience de Spalek y Bell. La información de Feder de la respuesta de Zweig al momento en que su amiga, la poeta chilena Gabriela Mistral, anunció su creencia de que los nazis invadirían Brasil, así como su reacción a la carta de Du Gard, se hallan en su artículo en Arens. También he consultado un relato mucho más detallado de Feder de su viaje al Carnaval con los Zweig, incluidos los comentarios de Zweig durante el viaje en coche de Petrópolis a Río, que fue publicado bajo el título «My Last Conversations with Stefan Zweig» en Books Abroad (invierno de 1943).

 

 

Epílogo

 

La afirmación de Zweig de que solo el cuerpo puede experimentar de verdad nos la transmite Geiger. El comentario de Friedenthal sobre la necesidad de contacto personal de Zweig aparece en su artículo «Stefan Zweig and Humanism», recogido en Arens. Zweig informa a Romains de que comparte la sensación de desaparición de Keats en una carta en «Derniers Mois Et Dernières Lettres de Stefan Zweig». «Fame—and Oblivion», el curioso artículo que escribió Zweig sobre la misteriosa fuerza que contrarresta la productividad humana y la misteriosa desaparición de la materia física creada por escritores y artistas, se publicó en The New York Herald Tribune el 11 de marzo de 1934. Irónicamente, en el artículo se describe a Zweig como el autor de Marie Antoinette: The Story of an Average Woman (María Antonieta), y The Case of Sergeant Grischa (La disputa por el sargento Grischa). Este último libro en realidad fue escrito por Arnold Zweig, sin relación alguna con Stefan. Las observaciones de Rolland de que Zweig se había convertido en un «Holandés Errante» por «ardiente deseo de conocer todas las fases de la vida» se citan en el obituario «Zweig and Wife, Refugees, End Lives in Brazil», publicado en The New York Herald Tribune, 24 de febrero de 1942. Zuckmayer describe su respuesta al suicidio de Zweig y su autoría de A Call to Life en «Did You Know Stefan Zweig?», artículo suyo en Arens. Las afirmaciones de Frank y Maurois sobre el suicidio de Zweig se citan en Prater. El editorial anónimo describiendo a los nazis como los verdaderos exiliados se titula «One of the Dispossessed», y apareció en The New York Times el 25 de febrero de 1942. Mis conversaciones con Barbara Frischmuth tuvieron lugar antes y después de nuestra aparición conjunta en un panel como parte del festival PEN World Voices, en la primavera de 2013. Su ayuda fue fundamental para comprender el legado de Zweig dentro de Austria, y el espectro más amplio de temas que enfrentaron a los jóvenes escritores en la Austria posterior a la guerra. Le estoy muy agradecido por el tiempo que dedicó a responder mis preguntas. Sobre la filosofía de la posibilidad de Zweig en relación con la acción, véase en particular su biografía de Erasmo y la colección Europäisches Erbe (S. Fischer Verlag, 1960), así como «The Worm in the Rose» de Steiman. Una nota al pie en un artículo de Steiman cita los comentarios de Zweig sobre la hermandad, que proceden del texto de Zweig «Bekenntnis zum Defaitismus», publicado en Die Friedens-Warte, vol. 20 (julio-agosto 1918). Fred T. Marsh caracterizó a Zweig como «un cristiano primitivo decadente» en «Zweig, a Great European Story Teller», una crítica publicada en The New York Herald Tribune, 1 de abril de 1934. Las palabras de Zweig diciendo que solo le interesaba escribir sobre los derrotados las pronunció en el curso de su entrevista con Curtiss. El extraordinario relato que hace Zuckmayer de las escenas en Viena después del Anschluss aparecen en sus memorias. Zweig describía Viena como una «ciudad maldita» en una carta a Frans Masereel de 1919 citada en «Zweig and the Vienna of Yesterday» de Prater. El comentario sobre la diversión de Viena y la máscara que se habían arrancado a la luz de la llegada de Hitler a Viena es de sus memorias. Los comentarios sobre la corrección filosófica del suicidio son una respuesta al Anschluss en referencia a Egon Friedell en una carta a Felix Braun citada por Dove.