Patatas Tandori
Te has
levantado con el día exótico casquivano y quieres sorprender a tu
pareja con un menú original y sugerente. Pero llega la hora y no
tienes cuerpo, no tienes tiempo, ni ganas de cocinar. Pues bien, o
llamas a "tele-rollito", el chino de la esquina (y allá tú tus
carnes morenas) o apuestas por esta receta hindú tan falsa como los
dragones del chino, pero capaz de trasladarte a las idílicas playas
de la mismísima Croa, que es un sitio idílico de la India, que os
lo digo yo que soy un hombre viajado. Y que tiene Google.
Ingredientes: 1 bote de patatas cocidas, 1 bote de salsa Tikka Másala (médium) de Patak's (un curry preparado indio que se encuentra sin problemas), 2 latas de mejillones al natural, 1 paquete de queso rallado emmental y sal.
Preparación: lavamos las maravillosas patatas de bote por las que siento debilidad bajo el grifo y las ponemos a hervir durante dos minutos. Se escurren y se ponen en un bol. Se salan un poco y se les añaden 4 ó 5 cucharadas del curry (yo le pongo también una cucharadita pequeña de salsa Sambal Oelek —otra de mis debilidades— y lo mezclo bien, lo que le aporta un toque extra de picante que es India pura) se remueve bien para que se Impregnen las patatas, añadiendo los mejillones, previamente escurridos, al final para que no se desmenucen. Trasladamos la mezcla a una bandeja de cristal tipo Pirex (resistente al calor), la cubrimos con el queso rallado y la metemos en el horno precalentado a 200 grados, hasta que el queso quede fundido, gratinado y apetitoso. Eso es todo. En total, no más de veinte minutos. Estaríais todavía deletreándole Infructuosamente la dirección al chino que os atiende.