EDGAR ALLAN POE (Boston, 1809-Baltimore, 1849), el creador del relato policial, fue también quien inauguró el relato moderno de terror en la lengua inglesa. El tema del doble ya había sido tratado por el alemán E. T. A. Hoffmann en «El hombre de la arena» (Piezas nocturnas, 1817), cuento que inspiraría en Sigmund Freud el ensayo Lo siniestro (1919). En «William Wilson», sin embargo, Poe va mucho más allá que Hoffmann (es una lástima que Freud no haya partido del norteamericano): el pánico a la homosexualidad que suele ser el sustrato del tema del doble se ve enfatizado en el cuento por claras señales autobiográficas (igual que Poe, Wilson y el protagonista nacen un 19 de enero; igual que Poe, el protagonista se arruina por el juego; igual que Poe, Wilson y el protagonista concurren a un colegio británico de larga tradición). Sin el ejemplo de «William Wilson», la literatura en lengua inglesa difícilmente hubiese podido producir dos de sus mejores novelas de fines del siglo XIX, El extraño caso de Dr. Jekyll y Mr. Hyde (1886), de Robert Louis Stevenson, y El retrato de Dorian Gray (1890), de Oscar Wilde.