NOCIONES PREVIAS AL JUEGO
Hubo una época en que trataba de mantener conversaciones normales con las mujeres que me gustaban. Habría jurado que ellas hacían cosas raras pero, estaba tan inmerso en intentar gustarles, que no le daba demasiadas vueltas al asunto.
Solo cuando me sentía realmente frustrado empezaba a plantearme la posibilidad de que hubiese algo más, algo en nuestra comunicación, que se me estaba pasando de largo.
¿A qué viene esto? Viene a que, si te pareces a mí, es posible que hasta ahora te hayas perdido de la misa, la mitad. Si, como ocurría en mi caso, crees que la expresión «comunicación sexual» se refiere a lo que escuchas cuando llamas a uno de esos teléfonos eróticos, necesitas una puesta a punto urgente.
Pero la culpa no es tuya. Seguramente, te has formado en la escuela equivocada, nada más. Yo, por ejemplo, tuve como mentores principales a mi madre y a mi tía. A ellas y a alguna que otra amiga del alma por cuyos huesos me moría pero que me ponía cara de asco cada vez que no le daba la razón, hablaba o me comportaba como un «cerdo machista», hacía «comentarios de salido» o me fijaba en «cosas típicas de un superficial de mierda». Amigas a las que me daba pavor contradecir pues, cada vez que lo hacía, era penalizado con alguna muestra clara de desaprobación, pérdida de interés o incluso ruptura de la amistad.
Solo ahora, tras haber recorrido un largo camino, sé que esos no eran los mejores profesores cuando uno quiere convertirse en un seductor irresistible. Pero lo triste es que, aun cuando hubiese tenido a un auténtico maestro de la seducción delante de mis narices (seguramente lo tuve) no habría podido darme cuenta de ello, por no hablar ya de sacar partido de su ejemplo.
No habría podido porque me faltaba el marco mental adecuado, porque carecía de las nociones más esenciales sobre el juego. Conceptos sin los cuales uno apenas se da cuenta de que existe un juego siquiera.
El objetivo que me he propuesto con este capítulo es evitar que a ti te ocurra algo parecido. Por ello, antes de abordar el juego de lleno, con sus diferentes aspectos, sus principios y hasta un excelente método que te servirá siempre para guiarte, compartiré contigo algunos conceptos básicos que te conviene tener muy claros.
Para que entiendas hasta qué punto esto es importante, comenzaré ofreciéndote una historia extraída de mi propia vida.