LA PNL COMO AMPLIFICADOR

La Programación Neuro Lingüística —o PNL— tuvo su origen en las investigaciones de Richard Bandler y John Grinder, a quienes podemos considerar como sus auténticos padres. Estos trataban de averiguar por qué determinados tratamientos de tres terapeutas en Estados Unidos[393] conseguían mayor éxito que el resto de sus colegas, y en el proceso de dichas investigaciones no tardaron en darse cuenta de que tenían algo importante entre manos.

Entre otras cosas, llegaron a la impactante conclusión de que la mente y el lenguaje humanos se pueden programar.

Según dicho hallazgo, toda conducta humana se acaba desarrollando sobre una «estructura» o «plantilla de pensamiento» aprendida, la cual puede ser detectada para ser modelada (es decir, copiada) por otras personas y obtener con ello similares resultados[394]. Algo, por ejemplo, que nos permitiría identificar las estrategias internas que utilizan las personas de éxito y adoptarlas nosotros mismos[395].

Otro rasgo del modelo de Bandler y Grinder es que arranca de una teoría constructivista. Esta no define la realidad como un descubrimiento, sino como una invención. En otras palabras, el ser humano no opera directamente sobre el mundo real en que vive. Lo hace, por el contrario, a través de representaciones mentales del mismo, las cuales determinan la forma en que cada individuo percibe la realidad.

Una frase muy extendida en PNL y que en cierto modo refleja esta idea es: «El mapa no es el territorio que representa».

En la actualidad, la PNL constituye un modelo muy extendido de cómo funciona la mente y la percepción humana, de cómo procesa la información y la experiencia. Describe, pues, de qué manera las personas piensan, aprenden, se motivan, interactúan, se comunican, evolucionan y cambian.

Y fiel al el enfoque marcadamente pragmático que la caracterizó desde sus orígenes, la PNL utiliza dicho conocimiento para estudiar sus diversas implicaciones en el terreno del éxito personal.

Así, una de sus principales aplicaciones se encuentra en la observación y el «modelado» de la excelencia. Algo que se lleva a cabo desde la convicción de que, si una persona tiene un logro, tal logro está acompañado de un «estado general» de la mente, el cuerpo y las emociones. Estado, por supuesto, que puede ser replicado al modelar a dicha persona.

Ahora bien, las técnicas de la PNL tienen un alcance mucho mayor. Al proporcionar herramientas y habilidades para el desarrollo de nuestra comunicación con otros[396], con nosotros mismos[397] y al permitirnos reprogramar actitudes tanto propias como ajenas, su campo de trabajo es tan amplio como el de las relaciones intrapersonales e interpersonales.

Los Aven que recurren a la PNL, se sirven de ella con dos propósitos:

  1. Afectarse a sí mismos para cambiar o reprogramar sus propias plantillas de pensamiento, con el fin de ganar confianza, hacerse más atractivos, mejorar aspectos de su juego, etc. Para lograrlo, a menudo recurren a modelar a otros Aven o Naturales.
  2. Afectar al Objetivo, cambiando o reprogramando elementos de su plantilla que puedan resultar limitadores para su juego y potenciando otros que en cambio actúan en su favor. Con frecuencia, esto se lleva a cabo usando técnicas de hipnosis basadas en principios de la PNL.

Aunque en este manual no le dedico demasiado espacio, en el ámbito de las Artes Venusianas existe toda una corriente de pensamiento que basa todos sus principios casi exclusivamente en la PNL. El principal precursor de dicha corriente es Ross Jeffries y su escuela de Seducción Acelerada[398].

Si te interesa profundizar en el tema, te recomiendo que trates de hacerte con su material. Aunque no escribe en español, en Internet pueden encontrarse algunas traducciones de sus obras con carácter no oficial realizadas por seguidores de su método.

Finalmente, solo me gustaría apuntar que la PNL no solo nos brinda un enorme conocimiento que podemos aplicar para influir en otros y en nosotros mismos. También nos brinda excelentes temas de conversación y recursos para crear Rutinas de Valor y de Romance.

Esto es así hasta el punto de que aún no he conocido ninguna mujer a la que no le apasione hablar y recrearse con este apasionante campo de profundización en el ser humano.

Aclarado esto, paso a ofrecerte algunos apuntes, trucos y consejos que pueden ayudarte a servirte de la PNL para amplificar tu juego. En la práctica, la mayoría de las técnicas y rutinas desarrolladas a partir de la PNL las usaremos a partir de la Campaña de Romance[399].

EL USO DE LA HIPNOSIS

Pese a lo exótico que pueda sonar, lo cierto es que la hipnosis es uno de esos recursos que no conviene menospreciar. Como hemos señalado, existe toda una escuela de seductores que se basa en ella para alcanzar éxitos espectaculares con las mujeres[400].

Yo no soy un hipnotista profesional y es muy posible que tú tampoco lo seas. Sin embargo, no cuesta tanto familiarizarse con algunos de sus principios básicos lo suficiente para poder sacarle partido.

Si por otra parte tenemos en cuenta que, a priori, las mujeres se sienten atraídas por este tipo de cosas[401], es fácil ver por qué no nos va a costar obtener su cooperación a la hora de «participar en juegos o experimentos», «ser ayudada a mejorar en la habilidad para canalizar y equilibrar la energía de la gente» o, simplemente, «prestarse a un ejercicio de regulación interna que va a proporcionarle un nuevo equilibrio, tanto a nivel vital como energético».

En algunos casos, muchas de las técnicas hipnóticas basadas en la PNL podrán usarse en medio de una conversación normal, sin requerir la colaboración explícita de la otra persona.

EL ANCLAJE[402]

Una de los recursos que los Aven hemos extraído de la PNL es el Anclaje.

Este nos permite vincular un sentimiento, emoción o sensación física concretos a un estímulo sensorial externo. Por ejemplo, nos permite vincular el estado interno de excitación sexual del Objetivo a algo externo que nosotros podamos controlar, como un gesto, un sonido, un objeto, etc.[403]

Si logramos crear una fuerte asociación entre emoción y estímulo[404], se dice que hemos logrado un buen Anclaje. Y, una vez creado dicho Anclaje, es posible aprovecharlo para generar, en cualquier momento, esa misma emoción sirviéndonos del estímulo que hemos utilizado.

En otras palabras, podríamos recurrir a ese sonido, objeto, gesto, etc., para despertar en el Objetivo esa excitación sexual que hemos puesto como ejemplo[405]. Con todo, se trata de una técnica que mucho mayor alcance, pues nos puede servir para provocar cualquier clase de emoción o sensación.

FRASES ARDILLA

Ya hemos mostrado la utilidad de las preguntas para empezar a provocar asociaciones y acabar creando Anclajes. Ahora bien, uno de los problemas de las preguntas directas es que pueden hacer que seamos detectados por el Radar del Objetivo.

Para escapar de ellas, disponemos de otra herramienta: las Frases Ardilla.

Las llamamos así porque estas frases resultan escurridizas como estos roedores y son capaces de colarse por entre los Radares de nuestro Objetivo.

Consisten en algo así como mandatos u órdenes camufladas. Cuando uso fórmulas lingüísticas como: «Estoy seguro de que…» «Apuesto que…» «Es mejor que no pienses en…» «Podríamos imaginar que…» «Olvídate de…» «Que ni se te pase por la cabeza que…» «No deberíamos…» o utilizo la cita, como «Fulano dijo que…», puedo dar prácticamente cualquier orden que me convenga o provocar cualquier clase de imagen mental sin incurrir en algo socialmente inaceptable y sin que ella active sus mecanismos de defensa.

Por ejemplo, si dices: «Sabes que no deberías —cambio de tono— imaginarnos a los dos haciendo el amor como animales. Así que sé buena y pórtate bien», ¿no estás obligándola precisamente a que lo imagine?[406]

PALABRAS DE TRANCE

Hemos visto como crear asociaciones y crear nuevos Anclajes.

Otra gran manera de servirnos de la PNL para seducir a una mujer se basa en sacar partido de sus propias Palabras de Trance.

Para descubrirlas, es importante que trates de obtener sus valores, ya sea con preguntas o dejándola hablar. Al hablar de ellos, presta atención, especialmente, a las palabras que usa al expresarse.

Verás que hay palabras en las que hace un especial hincapié o que repite con mucha frecuencia. Pues bien, estas son las que se conocen como Palabras de Trance.

Las Palabras de Trance le resultan especialmente familiares, por lo que su mente inconsciente las ha dotado de un poder particular. Si las usas tú mismo, podrás acceder a esta parte de ella con relativo poco esfuerzo.

En la práctica, reutilizar las propias Palabras de Trance que ella te ha ofrecido puede lograr que ella sienta que la entiendas completamente y casi que eres su alma gemela. Cualquier cosa que le digas y venga acompañada de estas palabras, tan familiares para, ella es mucho más probable que ella lo entienda y que resulte de su agrado.

A veces, basta con parafrasear lo que ella te acaba de decir, devolviéndole sus propias Palabras de Trance con un envoltorio y significado ligeramente distintos, según te convenga. O, cuando creas que es necesario actuar de manera más sofisticada, puedes escucharla y tomar nota mental de sus Palabras de Trance. Podrás entonces recurrir a ellas más tarde, quizás en otro contexto que se adecue más a tus propósitos. Por ejemplo:

: Si tuviese que preguntarte qué es lo más importante para ti en una relación, ¿cómo me lo describirías?

Ella: Quiero un hombre que me haga sentir cómoda conmigo misma. (Aunque dependería del contexto y de otras palabras, podríamos suponer que «sentir» y «cómoda» son algunas de sus Palabras de Trance. Recordándolas, más tarde y en otro contexto podrías decir):

: ¿No sería una pasada si pudieras compartir tu tiempo con un hombre que te hiciera sentir que puedes bajar la guardia y estar cómoda? ¿Alguien cuya voz te relajase y, a la vez, te estimulase? Y… ¿sabes qué? Tengo la impresión de que eso podría sucederte ahora mismo, conmigo[407].

AVERIGUA SU SISTEMA DE REPRESENTACIÓN

Otra cosa que puede resultarte de gran utilidad a la hora de realizar Anclajes es conocer el sistema de representación del Objetivo.

Me explico. Uno de los hallazgos de la PNL ha sido descubrir que todas las personas tenemos tres sistemas de representación y que, cada persona, ha desarrollado unos más que otros. Estos son el visual, el auditivo y el kinestésico.

Dichos sistemas determinan como asimilamos las experiencias y como las recordamos, por lo que afectan a nuestro aprendizaje.

Así, en tanto que una persona visual tiende a recordar y evocar recurriendo a imágenes, una auditiva desarrolla su memoria en torno a las palabras. Para alguien kinestésico, por otra parte, lo más importante serían las sensaciones físicas relacionadas con el tacto y el movimiento.

En función del vocabulario que esta persona utilice[408], de su profesión o aficiones[409], de lo que hace cuando se aburre[410], de cómo le gusta aprender o almacenar la información, de sus lecturas favoritas, de lo que provoca que se distraiga o no, de aquello que llama su atención con más facilidad, etc.[411], es fácil inferir si la persona que tenemos enfrente ha desarrollado alguno de estos tres sistemas por encima de la media.

De hecho, incluso los movimientos que realizan sus ojos cuando evocan pueden proporcionarnos valiosa información a este respecto[412].

Conocer su o sus sistemas de representación excepcionalmente desarrollados nos permitirán tres cosas:

Acceder con más facilidad a sus estados internos, es decir, a lo que está experimentando mediante un simple estudio de sus signos externos. La razón de esto es que una persona visual, una auditiva y otra kinestésica reaccionarán de forma distinta cuando viven o evocan alguna experiencia impactante.

Elegir más certeramente la clase de estímulos que debemos utilizar para llevar a cabo mejores Anclajes y, en general, lograr que todo lo que hagamos cause un mayor impacto en esa persona.

Hablar de ello, con la consiguiente proyección de Valor. Hacerlo, además, nos permitirá generar muchos elementos de Romance.

En otras palabras, ¿qué haces que no estás ya recopilando información valiosa sobre el tema que puedas utilizar en tus sargeos?

AUTOHIPNOSIS

Ya lo hemos mencionado. Uno de los grandes usos que el Aven puede hacer de la PNL es servirse de sus principios para efectuar modificaciones en sus propias plantillas de pensamiento, es decir, para reprogramarse.

Al hacerlo, puede modificar sus patrones de conducta tanto internos como externos o —por usar una expresión más propia de la PNL— sus estrategias.

De entre las formas que hay de conseguir esto, la autohipnosis es una de las más sencillas y gratificantes. Mi recomendación es que la utilices, entre otras cosas, para fortalecer tu Juego Interno[413].

Para autohipnotizarte puedes, por ejemplo, grabar afirmaciones que estén en sintonía con la clase de persona en la que te quieres convertir.

Si quieres hacer que resulten más eficaces, conviene que lo hagas con una música inductiva a la relajación. La idea es que logres alcanzar un estado de relajación profunda —o trance— cada vez que las escuches[414]. Algo que, a ser posible, deberás hacer con cierta periodicidad.

Así que ya sabes. Consigue una grabadora y ponte manos a la obra.

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