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La iluminación
del mundo

Delfina había regresado sigilosamente a la nave, y activando el mecanismo de elevación de la misma, por medio del cual se asciende hasta su interior, envolvió a Serafina, Shankal y Puchi en su luz elevadora y las ascendió.

Cuando estaban a punto de entrar en la nave, ésta se separó del suelo, dirigiéndose hacia una de las dunas más altas mientras que las tres eran transportadas en el aire.

Al llegar, fueron depositadas suavemente sobre la arena.

Una vez finalizada la maniobra Delfina se unió al grupo, dejando las luces brillando a su máxima potencia para poder así contemplar ese paisaje nocturno en todo su esplendor, como un gran faro de luz en la noche.

Shankal se emocionó, deseando de todo corazón que este mundo fuera de una vez por todas iluminado por la Luz del Amor, abriéndose las conciencias de la Humanidad a la realidad de una vida perfumada por su Sublime Vibración.

Y elevada en la emoción del momento, la Maestra les dirigió estas palabras:

—Como un bello y gran amanecer, el planeta está despertando a la realidad del Amor… Este sentimiento del Corazón se está anclando en la Tierra, facilitándose la Unión y la Nueva Conciencia. Por esto, es tan importante que se sienta.

»A los seres humanos que pueblan la Tierra, tan acostumbrados a lo material, les cuesta entender las realidades más sutiles, pero la Vibración de Amor se halla más cerca de ellos de lo que pueden llegarse a imaginar.

»Desde que por las altas instancias espirituales se decretó el fin del aislamiento del planeta, el conocimiento del Amor ha ido entrando en él respetándose el libre albedrío de sus habitantes, de forma que siempre ha de haber una duda razonable en sus mentes para que sea el propio Ser quien decida sobre su autenticidad.

—¿Y cómo lo reciben? —preguntó la niña.

—De muy diversas maneras, como en forma de libros u otro tipo de mensajes de conocimiento espiritual. Los dibujos geométricos, que amorosamente son dejados por nuestras naves en los campos de cultivo, son un claro ejemplo de valiosa información para su desarrollo tecnológico y espiritual; pero a pesar de la perfección de estos mensajes hay quienes todavía ponen en duda su autoría. Les parece fantástico que los hayan realizado seres de otros mundos, pero así es, no puede haber otra opción… Curiosamente, lo que debería ser de primera plana informativa pasa desapercibido para las grandes cadenas de televisión.

—¿Tampoco lo reflejan en sus noticiarios?

—Imperando la mentalidad dominante, que ridiculiza todo conocimiento, contacto y ayuda proveniente del espacio exterior, aunque el mundo esté cambiando a gran velocidad, para quienes conecten sus aparatos de radiotelevisión es como si todo siguiera igual o peor.

»El planeta está triste por la opresiva influencia de unos medios de comunicación al servicio del sistema. Cuando sus habitantes se decidan de una vez por todas a ignorar lo que vibrando en el miedo les hace tanto mal, sacudiéndose aquello que les impide levantarse y volar hacia su destino, acabará una larga noche de confusión y de prohibiciones para dar la bienvenida a la luz de un nuevo amanecer: «El Amanecer de Amor». Porque el Amor, la fuerza más sutil y poderosa se abre paso en este mundo, compartiéndose de Corazón a Corazón… Al igual que con el fuego de una sola antorcha se podría quemar todo el planeta, con el fuego de un solo corazón, extendiéndose de alma a alma, se encenderá el mundo de Amor.

—¿Y para cuándo se producirá este magnífico resplandor? —preguntó la niña con ilusión.

—Sus propios habitantes lo decidirán…

El cambio a nivel mundial ha de provenir de un cambio a nivel personal, desde el interior en cada uno, tomando consciencia de que son Amor, así como la firme decisión de hacer un mundo en el que disfrutarlo. Por lo tanto, más que una cuestión de tiempo es una cuestión de conciencia.

—¡Pero para eso hará falta un milagro! —exclamó la niña, conocedora del gran poder que ejercen los magnates de la comunicación sobre las mentes de los hombres.

—El milagro ha llegado, y se llama «compartir».

—¿Compartir?

—Compartiendo es como se extenderá la conciencia que logrará traer un mundo nuevo… El Padre-Amor nos ha hecho de su Luz regalándonos con ello la Vida, y también nos ha dado su sublime vibración para poder disfrutarla en plenitud, compartiendo su felicidad con todos nosotros. Por esto, cuanto más avanzado está un mundo, más se comparte en él, más se van acercando al ejemplo dado por el propio Creador.

La Maestra de Luz se tomó su tiempo, mirando calmadamente a su alrededor para no perderse ningún detalle de esa magnífica noche. Hasta su agradable temperatura bendecía esos momentos…

—En planetas como la Tierra —prosiguió— cuando el ego de sus habitantes sobrepasa al nivel de Amor, tienden a ocuparse más de sí mismos, insensibilizándose por los problemas ajenos. Pero conforme se elevan sus conciencias las corazas se van ablandando, interesándose más por mejorar lo que les rodea, lo que es un indicio de que van despertando. Y para que esto suceda, más allá de las malas noticias intrascendentes que se les ofrece diariamente para mantenerles dormidos y preocupados, se hace necesario informarles de la verdad, difundir información más positiva y elevada cuyo propósito principal sea la felicidad del Ser Humano: la información de Luz.

»En los momentos actuales, la labor más acuciante del Ser Humano es despertarse los unos a los otros, transmitiéndose el conocimiento necesario, difundiendo información que vibre en Amor.

—¿Y por qué no despiertan todos a la vez? ¿No sería más rápido? —preguntó Puchi con su natural curiosidad.

—Si esto fuera así se les estaría privando de la gloriosa experiencia de despertar en la oscuridad para entregar su Luz a los demás, lo que es una aventura espiritual muy codiciada por las Almas. Además, se podría producir una situación caótica, y con el fin de evitarla está dispuesto que se vayan guiando los unos a los otros.

La niña, adoptando una postura más cómoda sobre la arena, se quedó pensativa. Intentaba comprender por qué la difusión de una información que vibrase en Amor podría cambiar el mundo.

La Maestra, deseando iluminar su mente, buscó las palabras adecuadas…

—Nada hay superior a la experiencia de disfrutar el Amor y compartirlo —dijo pausadamente—. Quienes deseen la elevación del planeta habrán de compartir su conocimiento con los demás, y si éstos a su vez lo comparten, irán despertándose progresivamente las conciencias hasta llegar a hacer un mundo nuevo. Todo comienza por difundirse la energía positiva, la Energía del Amor, mensajes que vibren en Él, porque el Amor no es un sentimiento más: es la pura conciencia y esencia del Ser.

»Para conectar con la Energía Creadora tan solo tenemos que sentir su vibración en el Centro Energético del Corazón, concentrándonos en ella, elevándonos en su sublime sensación amorosa y en su conciencia. Pero también podemos ser conscientes del Amor cuando su Luz está en nuestras mentes en forma de pensamientos o de un conocimiento más elevado.

»Toda información contiene una energía, que nos lleva al estado de conciencia correspondiente a su vibración. Cuanto más bajo vibre en nuestra mente más nos alejaremos de nuestra propia conciencia, al igual que si vibra alto más conscientes seremos, puesto que somos Amor. De ahí la importancia de difundir la Energía Positiva para recobrar la conciencia de nosotros mismos.

»Nuestra libre voluntad está también condicionada por la calidad de la información que tenemos en mente y los magnates de la comunicación lo saben, por lo que difunden todo aquello que entretiene pero no estimula la creatividad, sugestionando con una publicidad que dice directamente lo que hay que hacer y comprar. Y los ciudadanos lo hacen y lo compran… ¿Sabes el porqué? —preguntó la Maestra a la alumna.

—¡Porque están hipnotizados! —Intervinieron a la vez las dos hermanas sin darle tiempo a responder.

—¿Hipnotizados? —preguntó la niñita sin comprender lo que querían decir.

—Es un estado de conciencia semejante al del sueño al que se llega por medio de sugestionar a las personas, anulando su voluntad, manteniéndoles mentalmente dormidos —le explicaron las dos hermanas—. Pero para que este mundo cambie sus ciudadanos han despertar, participar activamente en su entorno, difundir toda aquella información que vibre en el Amor. Y esto es algo que ya pueden hacerlo a nivel mundial…

—¿Sí? ¿Cómo? —preguntó Puchi cambiando su postura corporal, reflejando interés por la gran noticia.

—A través de las redes sociales —contestaron las hermanas, conocedoras del tema. La magia de compartir se ha plasmado ya en la red social «Facebook», habiéndose creado un espacio virtual para el entretenimiento y deleite de quienes participan en esta «Gran Fiesta».

»Una nueva y mágica Era de Amor Universal empieza ya a manifestarse al compartirse libremente la información que circula por esta bendita red, tal y como convenientemente nos ilustró el Maestro Sheram, sistema inspirado desde las alturas para traer una Nueva Conciencia.

»Cada vez son más quienes, alejándose de los medios «oficiales» y tradicionales de comunicación, buscan en las redes noticias e información más afín a su estado espiritual, posando su atención en lo que les proporciona la alegría y la paz, lejos de la monotemática información que siguen ofreciendo los medios de comunicación tradicionales cuyo único fundamento es el interés económico como medio de control de esta Humanidad.

»Una nueva familia de Luz se está formando al solicitarse amistad según la afinidad de lo que en esta red se comparte, tejiéndose la Red de Luz, que les permite estar conectados para poder seguir compartiendo. ¡El momento ha llegado de despertar a esta Humanidad, difundiendo sin temor, conscientes de la gran responsabilidad que se tiene entre manos!

»Si los que tenemos Luz no la compartiéramos todo seguiría igual de oscuro.

—Compartiendo información más elevada es como las mentes se van abriendo poderosamente a la Luz de la Verdad —prosiguió Shankal—, accediéndose a una dimensión más elevada del Amor, porque el poder del Amor se manifiesta cada día en la vida de miles y miles de personas de todo el planeta, cambiando su forma de pensar y de actuar, organizándose en silencio, vibrando más alto… ¡Despertando!

»Si algo gusta, se comparte por Amor para que los demás también puedan acceder a ello y les enriquezca. Así de maravilloso y sencillo es este sistema de difusión de la Luz: Recibiendo te enriqueces, dando te engrandeces, pero en compartir está el equilibrio perfecto.

—¿Y qué podemos hacer para que todo esto se sepa? —preguntó de nuevo la niña puesta en pie, emocionada.

—Tu propia experiencia quedará plasmada en una obra literaria para que, si gusta, se difunda. Si quienes se sientan identificados con ella la comparten, el mensaje llegará lejos y contribuirá hacer un mundo nuevo.

Con un gesto de Shankal, nuestras amigas comprendieron que ese día había llegado a su fin.

Cada cual se dispuso a descansar en donde su Ser le dictó a su mente. Como la propia energía de la nave impedía que pudieran sufrir daño alguno dentro de su radio de protección, Puchi optó por dormir plácidamente sobre la arena. Había sido un día cargado de emociones, y acariciando a Tris contemplaba el firmamento saboreando esos momentos, intuyendo que esa sería su última noche en el planeta.