Para mi familia, en especial a mis tres sobrinas; Amparo, Martina y la traviesa Eva. Y cómo no a mis hijos, que son el pilar de mi vida y a mi marido por la infinita paciencia que ha tenido conmigo durante la realización de esta novela.
“Lo único que necesita el mal para
triunfar es que los hombres buenos no hagan nada”
Edmund Burke
Edmund Burke