COCO CHANEL

Conclusión…

Y viviste feliz para siempre

¿Ser Cabrona y Millonaria es lo más importante en la vida? Eso tendrás que decidirlo tú.

De lo que yo estoy completamente convencida, por el efecto en mi vida y por lo que he visto en la vida de miles de mujeres que cambian su actitud hacia el dinero, es que es una parte indispensable para ser feliz.

Ser asertiva y tener en tus manos el control de tus finanzas indudablemente te permite tener más y mejores bienes materiales, pero también te otorga libertad, tranquilidad y seguridad. Te convierte en un ejemplo para las demás mujeres, y lo que es más importante, te convierte en un orgullo para ti misma… Sentimientos que, se supone, “el dinero no puede comprar”, pero que el buen manejo del dinero concede.

A fin de cuentas, ser Cabrona y Millonaria definitivamente es mucho mejor que ser agachada y pobre.

Los resultados que vas a obtener si aplicas las reglas de este libro son para el resto de la vida (es como aprender a manejar una bicicleta, lo bien aprendido jamás se olvida… o como el sexo). Si sientes que alguna vez tus finanzas se desvían o se desenfocan, o que las circunstancias de tu vida cambian radicalmente, vuelve a darle un acelerón a tu metabolismo financiero, reanaliza tu situación actual y tus metas y afina las reglas con las que estás manejando el dinero.

A fin de cuentas resulta ser que Walt Disney tenía un poco de razón: los cuentos de hadas sí existen, aun cuando haya estado un poco equivocado en la forma y las condiciones. Puede ser que no caminemos por la vida con pajarillos trinando a nuestro paso (más bien son cláxones); que sea un mito la existencia del cutis perfecto y blanco como la nieve (sin la ayudadita de algunas cremas); o que los finales felices no sean eternos (algunos días son más felices que otros).

Lo que es un hecho es que cada una de nosotras es la princesa de su propio cuento buscando concretar sus sueños, sean los que sean. La diferencia entre el mundo de fantasía y el planeta Tierra es que en la realidad cada una de nostras es, además de la princesa, también su propia hada madrina, ya que cada una de nosotras tiene en su poder la magia (y el dinero) para convertir sus deseos más grandes en realidad.

Cabrona y millonaria
titlepage.xhtml
sec_0001.xhtml
sec_0002.xhtml
sec_0003.xhtml
sec_0004.xhtml
sec_0005.xhtml
sec_0006.xhtml
sec_0007.xhtml
sec_0008.xhtml
sec_0009.xhtml
sec_0010.xhtml
sec_0011.xhtml
sec_0012.xhtml
sec_0013.xhtml
sec_0014.xhtml
sec_0015.xhtml
sec_0016.xhtml
sec_0017.xhtml
sec_0018.xhtml
sec_0019.xhtml
sec_0020.xhtml
sec_0021.xhtml
sec_0022.xhtml
sec_0023.xhtml
sec_0024.xhtml
sec_0025.xhtml
sec_0026.xhtml
sec_0027.xhtml
sec_0028.xhtml
sec_0029.xhtml
sec_0030.xhtml
sec_0031.xhtml
sec_0032.xhtml
sec_0033.xhtml
sec_0034.xhtml
sec_0035.xhtml
sec_0036.xhtml
sec_0037.xhtml
sec_0038.xhtml
sec_0039.xhtml
sec_0040.xhtml
sec_0041.xhtml
sec_0042.xhtml
sec_0043.xhtml
sec_0044.xhtml
sec_0045.xhtml
sec_0046.xhtml
sec_0047.xhtml
sec_0048.xhtml
sec_0049.xhtml
sec_0050.xhtml
sec_0051.xhtml
sec_0052.xhtml
sec_0053.xhtml
sec_0054.xhtml
sec_0055.xhtml
sec_0056.xhtml
sec_0057.xhtml
sec_0058.xhtml
sec_0059.xhtml
sec_0060.xhtml
sec_0061.xhtml
sec_0062.xhtml
sec_0063.xhtml
sec_0064.xhtml
sec_0065.xhtml
sec_0066.xhtml
sec_0067.xhtml
sec_0068.xhtml
sec_0069.xhtml
sec_0070.xhtml
sec_0071.xhtml
sec_0072.xhtml
sec_0073.xhtml
sec_0074.xhtml
sec_0075.xhtml
sec_0076.xhtml
sec_0077.xhtml
sec_0078.xhtml
sec_0079.xhtml
sec_0080.xhtml
sec_0081.xhtml
sec_0082.xhtml
sec_0083.xhtml
sec_0084.xhtml
sec_0085.xhtml
sec_0086.xhtml
sec_0087.xhtml
sec_0088.xhtml
sec_0089.xhtml
sec_0090.xhtml
sec_0091.xhtml
sec_0092.xhtml
sec_0093.xhtml
sec_0094.xhtml
sec_0095.xhtml
sec_0096.xhtml
sec_0097.xhtml
sec_0098.xhtml
sec_0099.xhtml
sec_0100.xhtml
sec_0101.xhtml
sec_0102.xhtml
sec_0103.xhtml
sec_0104.xhtml
sec_0105.xhtml
sec_0106.xhtml
sec_0107.xhtml
sec_0108.xhtml
sec_0109.xhtml
sec_0110.xhtml
sec_0111.xhtml
sec_0112.xhtml
sec_0113.xhtml