CAPÍTULO 98

Tessa

Sé lo que debería haber hecho: debería haberle dicho a Hardin que se marchara, pero no he podido. Casi nunca exterioriza sus emociones, y verlo postrado de rodillas delante de mí me ha partido mi ya maltrecho corazón en mil pedazos. Le he dicho que pensaría lo de darnos otra oportunidad, pero no veo la manera de que esto funcione.

Ahora mismo tengo sentimientos encontrados, estoy más confundida que nunca y enfadada conmigo misma por haber estado a punto de entregarme a él por completo. No obstante, por otro lado, estoy orgullosa de haber parado las cosas antes de que llegaran demasiado lejos. Necesito pensar en mí, y no sólo en él, por una vez.

Mientras Landon conduce, mi teléfono vibra en mi regazo y miro la pantalla.

Es un mensaje de Zed.

¿Estás bien?

Respiro hondo antes de contestar.

Sí, estoy bien. Voy de camino al campus con Landon. Siento lo de anoche, fue culpa mía que fuera allí.

Pulso «Enviar» y centro la atención en Landon.

—¿Qué crees que va a pasar ahora? —me pregunta.

—No tengo ni idea. Aún tengo intención de hablar con Christian sobre lo de Seattle —respondo.

Zed me escribe otra vez:

No, no lo fue. La culpa es suya. Me alegro de que estés bien. ¿Sigue en pie lo de la comida de hoy?

Había olvidado nuestro plan de quedar en la Facultad de Ciencias Medioambientales para comer. Me dijo que quería enseñarme unas flores que brillan en la oscuridad que ha ayudado a crear.

Me gustaría mantener mis planes con él; se ha portado muy bien conmigo con todo esto, pero después de haber besado a Hardin esta mañana no sé qué hacer. Anoche dormí en casa de Zed y esta mañana he besado a Hardin. «¿Qué me está pasando?» No quiero ser esa clase de chica; todavía me siento algo culpable por lo que pasó con Hardin cuando aún estaba con Noah. En mi defensa he de decir, sin embargo, que Hardin apareció como una bola de demolición. No tuve más remedio que gravitar hacia él mientras él me destruía lentamente y después me reconstruía para destruirme otra vez.

Lo que está pasando con Zed es totalmente distinto. Hardin llevaba once días sin hablarme y yo no tenía ni idea de por qué. Llegué a la conclusión de que ya no me quería, y Zed estaba ahí para mí. Siempre ha sido un encanto conmigo. Intentó zanjar la apuesta con Hardin pero él no lo aceptó, tenía que demostrar que podía ganarme a pesar de la insistencia de Zed de acabar con ese asqueroso juego.

Entre Hardin y Zed ha habido mal rollo desde que los conozco. No estoy segura de cuál es la razón —a causa de la apuesta, he empezado a suponer últimamente—, pero su animadversión era evidente desde que empecé a salir con ellos. Hardin dice que Zed sólo quiere meterse en mis bragas pero, sinceramente, me parece un comentario muy hipócrita por su parte. Y Zed no ha hecho nada que me haga pensar que está intentando acostarse conmigo. Nunca, ni siquiera antes de que me enterase de lo de la apuesta y de que lo besase en su apartamento, me ha hecho sentir que tuviera que hacer nada que no quisiera hacer.

Detesto cuando mi mente se traslada a esos días. Fui una estúpida, y ambos estaban jugando conmigo. No obstante, hay algo tras los ojos de color caramelo de Zed que me inspira bondad, mientras que detrás de los ojos verdes de Hardin sólo veo ira.

«Sí. Nos vemos a mediodía», le respondo a Zed.

En mil pedazos
Cubierta.xhtml
Sinopsis.xhtml
Titulo.xhtml
info.xhtml
NotaEditor.xhtml
dedicatoria.xhtml
Prologo.xhtml
Cap001.xhtml
Cap002.xhtml
Cap003.xhtml
Cap004.xhtml
Cap005.xhtml
Cap006.xhtml
Cap007.xhtml
Cap008.xhtml
Cap009.xhtml
Cap010.xhtml
Cap011.xhtml
Cap012.xhtml
Cap013.xhtml
Cap014.xhtml
Cap015.xhtml
Cap016.xhtml
Cap017.xhtml
Cap018.xhtml
Cap019.xhtml
Cap020.xhtml
Cap021.xhtml
Cap022.xhtml
Cap023.xhtml
Cap024.xhtml
Cap025.xhtml
Cap026.xhtml
Cap027.xhtml
Cap028.xhtml
Cap029.xhtml
Cap030.xhtml
Cap031.xhtml
Cap032.xhtml
Cap033.xhtml
Cap034.xhtml
Cap035.xhtml
Cap036.xhtml
Cap037.xhtml
Cap038.xhtml
Cap039.xhtml
Cap040.xhtml
Cap041.xhtml
Cap042.xhtml
Cap043.xhtml
Cap044.xhtml
Cap045.xhtml
Cap046.xhtml
Cap047.xhtml
Cap048.xhtml
Cap049.xhtml
Cap050.xhtml
Cap051.xhtml
Cap052.xhtml
Cap053.xhtml
Cap054.xhtml
Cap055.xhtml
Cap056.xhtml
Cap057.xhtml
Cap058.xhtml
Cap059.xhtml
Cap060.xhtml
Cap061.xhtml
Cap062.xhtml
Cap063.xhtml
Cap064.xhtml
Cap065.xhtml
Cap066.xhtml
Cap067.xhtml
Cap068.xhtml
Cap069.xhtml
Cap070.xhtml
Cap071.xhtml
Cap072.xhtml
Cap073.xhtml
Cap074.xhtml
Cap075.xhtml
Cap076.xhtml
Cap077.xhtml
Cap078.xhtml
Cap079.xhtml
Cap080.xhtml
Cap081.xhtml
Cap082.xhtml
Cap083.xhtml
Cap084.xhtml
Cap085.xhtml
Cap086.xhtml
Cap087.xhtml
Cap088.xhtml
Cap089.xhtml
Cap090.xhtml
Cap091.xhtml
Cap092.xhtml
Cap093.xhtml
Cap094.xhtml
Cap095.xhtml
Cap096.xhtml
Cap097.xhtml
Cap098.xhtml
Cap099.xhtml
Cap100.xhtml
Cap101.xhtml
Cap102.xhtml
Cap103.xhtml
Cap104.xhtml
Cap105.xhtml
Cap106.xhtml
Cap107.xhtml
Cap108.xhtml
Cap109.xhtml
Cap110.xhtml
Cap111.xhtml
Cap112.xhtml
Cap113.xhtml
Cap114.xhtml
Cap115.xhtml
Cap116.xhtml
Cap117.xhtml
Cap118.xhtml
Cap119.xhtml
Cap120.xhtml
Cap121.xhtml
Cap122.xhtml
Cap123.xhtml
Agradecimientos.xhtml