Mantenimiento de tus giradiscos
Haz durar tus giradiscos el máximo tiempo posible dedicándoles de vez en cuando un poco de cuidado y atención. En Internet encontrarás información abundante sobre cómo reparar las diversas partes del equipo, pero un poco de limpieza y lubricación te servirá para mantener las cosas en su sitio.
Como regla general para todos tus equipos: si no los usas,
cúbrelos. Si tus giradiscos tienen tapas de plástico, ponlas
mientras no los estés usando. Si tienes los giradiscos en cajas de
transporte, pon las tapas en las cajas. Si ninguno de éstos es tu
caso, cubre los giradiscos con una sábana limpia (o con un trozo de
tela suave, limpio y sin pelusa) cuando no los utilices, para que
el polvo no tenga oportunidad de meterse en los faders, el motor y el
brazo.
Motor:
si mantienes el motor bien lubricado, puede
funcionar perfectamente durante años. Lo único que debes hacer es
quitar el plato y poner una pequeña gota de aceite lubricante de
máquina de coser en el eje central. ¡Es mejor utilizar este aceite
lubricante que cubrir todo el interior del giradiscos con una capa
pegajosa de lubricante en aerosol!
Una vez lubricado el motor, vuelve a poner el plato y hazlo girar con la mano. Puedes utilizar el giradiscos inmediatamente, mientras no hayas volcado media lata de aceite en los mecanismos internos.
Brazo:
necesitarás una lata de aire comprimido y una
lata de lubricante desengrasante para limpiar a conciencia la
montura del brazo (el desengrasante disolverá toda la suciedad que
no puedas limpiar a mano o con el aire). No te preocupes si crees
que esos aerosoles son caros; vas a necesitarlos también para tu
mesa de mezclas (consulta el capítulo 10).
Cubre el resto de tu equipo con una sábana que no te importe que se ensucie y rocía la montura del brazo con el aerosol de aire comprimido para quitar el polvo superficial (la sábana es para que no te limites a mover el polvo de un giradiscos al otro). Rocía el disolvente de grasa en los rodamientos del brazo para quitar la suciedad muy pegada y mantenerlos lubricados.
Pitch
fader: utiliza el aire comprimido para soplar la suciedad
del pitch fader. Utiliza el lubricante limpiador para disolver cualquier
residuo de suciedad del fader
si crees que tienes un problema con esto, pero
el aire comprimido suele bastar para limpiarlo.
Cápsula:
si alguna vez tienes problemas de caída de señal
del cartucho (cuando la música empieza a interrumpirse y cortarse),
utiliza un lápiz o una aguja para limpiar la suciedad de los
contactos. He oído hablar de DJ que chupan los contactos de la
cápsula y del cartucho para limpiar la suciedad, pero esto, aparte
de asqueroso, hace que tu saliva (mezclada con la cerveza que te
acabas de tomar) acabe a largo plazo por deteriorar los
contactos.
Comprueba que los tornillos que sostienen el cartucho estén apretados, que la aguja no haya acumulado suciedad y que esté segura dentro del cartucho.
Bajo el
plato: si tu giradiscos tiene plato
desmontable, levántalo y limpia la parte de debajo con un paño sin
pelusa, y asegúrate de limpiar la suciedad que pueda haber bajo el
plato. Utilizar el aire comprimido para esto puede ser una mala
idea, porque es posible que soples el polvo más hacia adentro del
chasis del giradiscos. Aunque un poco de suciedad puede no ser un
problema para la electrónica, no es una buena idea ir metiendo cada
vez más polvo dentro del giradiscos.