AGRADECIMIENTOS

Aunque el autor sea uno, una novela no es un logro individual.

Una serie de personas han contribuido de diferentes modos y generosamente a este trabajo y, a pesar de que una simple mención no puede hacerles justicia, tienen que saber que esta novela no habría podido llegar a ser lo que es sin ellos. Aunque los he ido conociendo a través de nuestro trabajo, ya se han convertido en parte de mi familia. Los que no menciono por su nombre espero que me perdonen: ellos saben quiénes son.

Estoy especialmente en deuda con mi agente, Euan Thorneycroft, un hombre de paciencia infinita y cualidades incomparables; Jon Wood es el mejor editor que podría desear un autor, y doy las gracias también a su esposa, Ellie, por su amistad y por hacer mejor aún a Jon; mis amigos de Orion —demasiados como para nombrarlos a todos— han hecho que este último año sea realmente memorable. Robyn Karney, que hace que un trabajo tan difícil parezca tan fácil, ha conseguido, con su gran visión y su dedicación, que todos mis libros sean mucho mejores. Y querría mencionar el gran apoyo y los ánimos recibidos de Amanda Ross, Gareth, Duncan, John y todos los de Cactus TV; gracias también a mi hermano, Guy, que lee con tanta atención y me plantea grandes retos.

Por último, aunque desde luego no por ello con menos énfasis, quiero expresar mi gratitud a toda la gente del Richard & Judy Book Club, 2008, por el tremendo apoyo y la promoción que han hecho de Solo el silencio.

R. J. ELLORY, 2008