Querido James,

Espero que estés bien. Yo me encuentro en Suiza y estoy muy triste. Ahora tengo claro que nunca más volveré a Kenia. Hoy se lo he escrito a Lketinga, porque ya no tengo fuerzas para seguir viviendo con tu hermano. Me sentía muy sola por ser blanca. Tú lo has vivido. Le di una última posibilidad en Mombasa, pero las cosas no mejoraron, más bien empeoraron aún más. ¡Y un día lo quise tanto! Pero desde la pelea por Napirai ese amor empezó a resquebrajarse. Desde ese día ya no hacíamos otra cosa que pelearnos de la mañana hasta la noche. Solo tiene pensamientos negativos. Creo que no sabe lo que es el amor, porque cuando se quiere a alguien, no se pueden decir estas cosas.

Mombasa era mi última esperanza, pero él no cambió. Era como estar en la cárcel. Abrimos una buena tienda, pero no creo que pueda trabajar allí él solo. ¡Por favor, ve cuanto antes a Mombasa y habla con él! Ahora ya no tiene a nadie y está completamente solo. Si quiere vender la tienda puedo hablar por teléfono con Anil, pero tengo que saber lo que quiere hacer. También se puede quedar con el coche. Por favor, James, ve a Mombasa lo antes posible, porque Lketinga te necesitará cuando reciba mi carta. Desde Suiza le ayudaré tanto como pueda. Si lo vende todo, será un hombre rico. Pero tiene que ser prudente, si no, la gran parentela gastará rápidamente todo su dinero. No sé cómo marchará la tienda sin mí, pero hasta ahora era un buen negocio. Por favor, comprueba cómo va todo, porque hay mucho dinero invertido en la tienda en forma de joyas de oro y otros objetos. No quiero que estafen a Lketinga. Espero que todos sepan perdonarme por lo que tuve que hacer. Si volviera a Kenia me moriría en poco tiempo.

Por favor, explícaselo todo a tu madre. La quiero y no la olvidaré nunca. Desgraciadamente no puedo hablar con ella. Cuéntale que lo intenté todo para poder vivir con Lketinga, pero su cabeza vive en otro mundo. Por favor, contéstame pronto cuando recibas esta carta. Yo también tengo muchos problemas, porque no sé si podré quedarme en Suiza. Si no puedo quedarme aquí, iré a Alemania. Durante los próximos tres meses viviré en casa de mi madre.

Saludos de Corinne.