SOPA DE PUERRO GRATINADA
Utilizar los esqueletos de pollo para hacer el caldo es un recurso muy socorrido porque, además de ser muy baratos, le aportarán un sabor muy interesante.
Ingredientes // 4 personas
12 puerros |
2 esqueletos de pollo |
4 dientes de ajo |
1 cebolla |
3 higadillos de pollo |
2 rebanadas de pan |
30 g de pan seco |
50 g de queso rallado |
agua |
aceite de oliva virgen extra |
sal |
cebollino |
Elaboración
1. Dora los esqueletos en la olla con un chorrito de aceite. Pela y pica la cebolla y los ajos, y añádelos. Dora todo a fuego fuerte, cubre con agua y sazona. Coloca la tapa y cuece todo durante 10 minutos (a partir de que comience a salir el vapor). Cuela y reserva.
2. Limpia bien los puerros y pícalos en cilindros. Ponlos a pochar en una cazuela con un chorro de aceite. Sazona, deja que se pochen bien e incorpora el pan seco troceado. Cubre todo con el caldo, pon a punto de sal y cuece el conjunto a fuego suave durante 15 minutos.
3. Corta las rebanadas de pan en dados y fríelos en una sartén con aceite. Escúrrelos sobre un plato forrado con papel absorbente de cocina y resérvalos. Corta los higadillos en trocitos, sazónalos y saltéalos en la misma sartén. Resérvalos.
4. Reparte la sopa en 4 cuencos, agrega a cada uno unos trocitos de higadillo y unos panes fritos. Espolvorea el queso por encima y gratínalos en el horno durante 4-5 minutos. Sirve y espolvorea con un poco de cebollino picado.
