Sobre una novela política[415]
13 de abril de 1932
Estimada camarada M. Neumann:
Le entregué su novela a dos amigos jóvenes. La encontraron muy interesante y cuando terminaron de leerla les quedó a los dos la misma firme impresión: emocionalmente con la Oposición, políticamente contra la Oposición. Coinciden totalmente conmigo. Usted misma no intenta ocultar esta actitud. Por el contrario, ya en el título del libro expresa su conclusión: No puedo seguir adelante. No se refiere sólo a la Oposición sino al conjunto de la Unión Soviética: no aguanto más. Usted desarrolla esta línea ubicando la raíz del problema en la dictadura del proletariado. Pero en este problema radica la diferencia entre el comunismo y el reformismo: con éste la dictadura, con aquél la democracia. También en este sentido su libro está totalmente a favor de la socialdemocracia y en contra del comunismo. No me cabe ninguna duda de que ese no era su objetivo, pero de todos modos lo alcanzó, Comprenderá que le diga que en ningún caso y de ninguna manera puedo solidarizarme con este libro. No es justo, no tanto respecto a mi sino a la causa que defiendo, que el editor quiera poner mi retrato en la solapa. Pero, por supuesto, no puedo impedirlo.
Permítame añadir que su libro contiene errores fácticos. El Quinto Congreso Mundial [1924] no giró alrededor de una «revolución perdida», Por el contrario, todavía tenia por delante una situación revolucionaria. Nadie pretendió censurar mi discurso. Y yo no estuve en contra sino a favor de la manifestación de noviembre de 1927.
Le agradezco sinceramente sus sentimientos amistosos hacia mí. Con sus cartas usted se ganó hasta tal punto mi afecto que siento profundamente que nuestros caminos se aparten en direcciones tan irreconciliables.
Con sinceros saludos, suyo
L. Trotsky