Enfermedades
Los gatos senior deben ser revisados periódicamente para evaluar la posible presencia de patalogías; es ideal que estas revisiones se realicen al menos una vez al año.
Entre los principales problemas que debemos conocer para poderlos evitar están:
- Órganos de los sentidos: el gato geriátrico experimenta una disminución de la capacidad olfativa, lo que provoca un menor interés por el alimento, disminución de peso… Pero no sólo disminuye la capacidad olfativa, el resto de percepciones sensitivas también disminuye (audición disminuida, agudeza visual disminuida…).
- Sistema gastrointestinal: la enfermedad periodontal es una de las enfermedades más comunes en los gatos geriátricos; las gingivitis, la pérdida de piezas dentales, la disminución de la producción de saliva, las úlceras en la boca… Producen un menor interés por el alimento; pero los problemas gastrointestinales no sólo parten de la boca; existe disminución de la función hepática, peor absorción intestinal, peor movilidad del colon… Estos cambios son los responsables de estreñimiento, flatulencia, etcétera.
- Sistema tegumentario: los tumores cutáneos pueden ser
considerados como los de más frecuente aparición en los gatos
senior; los tumores mamarios de las hembras, las
neoplasias digestivas… son también frecuentes en estos animales.
También podemos decir que la piel de estos animales mayores sufre una clara pérdida de elasticidad y que el pelo suele presentarse en mal estado.
- Sistema urinario: el fallo renal es la enfermedad geriátrica «por excelencia» para los gatos; las causas son difíciles de encontrar, pero sí podemos decir que los animales manifiestan síntomas cuando el problema está bastante avanzado.