Modificación de la conducta
A lo largo de la vida de nuestro gato y durante nuestra diaria convivencia, es más que posible que aflore en el animal algún comportamiento anómalo que deba ser valorado y manejado por un profesional.
En multitud de ocasiones los problemas de comportamiento de los felinos no son tratados quizá, entre otras razones, por el desconocimiento del propietario en lo referente a las técnicas de modificación de la conducta.
Desgraciadamente este desconocimiento también puede ser la causa de que la única solución planteada para solucionar este tipo de problemas en multitud de ocasiones consista en «sacar» al animal de casa.
Para conseguir modificar una consulta indeseable de un gato, y teniendo claro que contamos con un diagnóstico certero, necesitamos una actuación en tres frentes:
- Participación del propietario: el dueño del animal, y más
concretamente su formación en el manejo de animales de compañía,
tiene gran importancia en la presencia o ausencia de problemas
tanto orgánicos como comportamentales; el propietario, y su
adecuada intervención en el proceso, es vital para una correcta
resolución de cualquier tipo de problema de su animal de compañía.
En el caso de los problemas de comportamiento que necesitan modificaciones de conducta, el propietario debe tener claros los puntos a seguir y además, y muy importante, estar plenamente conforme con la pauta sugerida.
En la mayoría de las ocasiones la modificación de conducta del animal será controlada de forma casi exclusiva por el propietario: permitir o no salidas al exterior, tipo de juegos y ejercicios, zonas de eliminación…
Si el propietario recibe la información necesaria por parte del profesional y asume su rol en el proceso, el éxito está garantizado.
- Modificación del entorno: la modificación del entorno o del ambiente del gato consiste en manipular sus zonas habituales o situar al propio individuo en ubicaciones en las que sea menos probable la presentación del problema; por ejemplo, podemos citar la colocación de la bandeja de lecho absorbente en el lugar en el que el gato realiza eliminaciones inadecuadas.
- Modificación del animal de compañía: la modificación de los
comportamientos inadecuados del gato pasa por alguna de las
siguientes actuaciones:
- Eliminación del gato de la casa: son muchos los casos en los que la despreocupación o el desconocimiento provocan que el animal con un problema de conducta salga del hogar. Solamente en ciertos casos de agresividad en los que existe un riesgo para los integrantes de la familia puede plantearse la drástica solución de no seguir conviviendo con el gato. Nunca debemos pensar que la decisión drástica es un fracaso, en muchas ocasiones, aparte del riesgo para los propietarios, el mantenimiento del animal problema en el hogar puede conducir a manejos crueles de los animales debidos a estrategias inadecuadas o pensadas por los propietarios sin ningún tipo de asesoramiento.
- Modificación de la conducta mediante cirugía: la castración de
los machos suele ser la cirugía más utilizada para el manejo de
ciertas conductas no deseadas de los gatos; la castración puede
evitar conductas sexuales inaceptables, reducir la agresividad,
evitar la reproducción incontrolada, prevenir los malos hábitos
higiénicos…
La castración de los gatos machos disminuye el vagabundeo, por lo que reduce la posibilidad de que el animal se enfrente con mayor riesgo a problemas víricos, bacterianos, parasitarios…
Existen otras técnicas quirúrgicas, como la desungulación en gatos conflictivos; técnica que sólo debería plantearse como paso previo a la eutanasia del animal y nunca como un primer paso para evitar, por ejemplo, que el gato «nos arañe las cortinas». Tengamos muy en cuenta que esta cirugía es inadmisible e incluso ilegal en algunos países.
- Modificación de la conducta del animal de compañía: esta actuación consiste en aplicar técnicas que cambian la conducta de la mascota y es un recurso prioritario para corregir manifestaciones inadecuadas o indeseables del animal. Por ello es importante conocer las técnicas y los términos utilizados en este tipo de terapias.