VII
SÉ, Rosa, que existir es indudable-
mente triste. Por eso a ti me acojo,
pensando que a tu sombra será menos,
o que sepa vivir de otra manera.
Un poco otra manera, que es librarse,
librarse un poco y caminar un trecho;
pensar en ti. ¿Acaso no soñamos?
Soñar, Rosa, contigo es esperarse
indefinidamente, ver la angustia
pasar como una sombra. Tu voz suena;
Descansa. Tiembla un poco. No respires.