¿Acusadores o acusados[527]?
28 de mayo de 1940
El periódico El Popular, y ahora la revista Futuro, se dirigieron al Fiscal de Distrito del Distrito Federal presentando una queja en la que me acusan del crimen de «difamación». En lo que a mí respecta, queda claro que tengo toda la voluntad de que vayan a la corte y de contestar personalmente los cargos que se me hacen. Más aún; durante tres años y medio invité repetidas veces a estas publicaciones a someter a una comisión imparcial sus acusaciones contra mí, designada ya sea por el gobierno o por el PRM, y mis acusadores nunca aceptaron mi propuesta.
La actual propuesta de los directores de El Popular y Futuro de plantear el caso ante las autoridades competentes constituye una aceptación largamente postergada de mi propuesta anterior. Me parece lo mejor que la justicia mexicana intervenga en este caso.
Así como los organizadores del ataque del 24 de mayo y sus «amigos» difundieron el rumor de que yo «me asalté a mí mismo», las personas que, a las órdenes de la GPU me calumniaron durante años para ayudar a Stalin, hoy intentan acusarme de difamación.
Puedo asegurar de antemano al público que los directores de El Popular y Futuro me encontrarán bien preparado y que los acusadores se transformarán en acusados.