Ingredientes: 6 p.
1 NARANJA
2 KIWIS
600 G DE AZÚCAR
1/4 DE L DE NATA MONTADA
2 PLACAS DE BIZCOCHO
150 ML DEL ALMÍBAR DE LAS NARANJAS MANTEQUILLA AZÚCAR GLAS
PARA LA CREMA PASTELERA:
1/2 L DE LECHE
3 YEMAS
1 HUEVO
40 G DE HARINA
75 G DE AZÚCAR
1 VAINA DE VAINILLA
Hierve 900 ml de agua con el azúcar. Añade rodajas finas de naranja sin pelar y cuece a fuego lento durante 2 horas. Vierte las naranjas y el almíbar en un cuenco y déjalas reposar toda la noche. Reserva el almíbar de naranjas resultante. Para la crema pastelera, pon a calentar casi toda la leche. Abre una vaina de vainilla y añádesela para aromatizar. En un bol mezcla el azúcar y la harina. Ponle un poco de leche y remueve para que no haya grumos. Añade las yemas y el huevo entero y mezcla todo bien.
Agrega un poco de leche caliente a la mezcla de los huevos y vuélcalo a la cazuela.
Unta un molde con mantequilla y espolvorea con azúcar glas. Pela y corta en rodajas finas los kiwis. Coloca una rodaja de la naranja en el centro del molde y rodéala con otras de kiwi. Rodea éstas con rodajas de naranja, procurando que cubran las paredes del molde. Mezcla la nata y la crema pastelera y añade 2 rodajas de naranja picadas.
Rellena el molde con esta crema hasta la mitad. Pon encima una capa de bizcocho emborrachada con el almíbar de naranjas. Pon otra capa de crema, cúbrela con la otra placa de bizcocho y vuelve a emborrachar con el almíbar. Tapa el bizcocho con un papel. Coloca un plato encima e introdúcelo en el frigorífico durante 2 horas. Separa los bordes con una puntilla y desmolda.