11
El 21 de septiembre de 1944, hizo un tal Paul Martinie la siguiente declaración ante funcionarios del 145th CIC Detachment, United States Army, Europe:
—Desde enero de 1944, era yo prisionero de la Gestapo en la rue de Paradis. A partir del 23 de agosto empezó a reinar allí la mayor confusión y desconcierto. De pronto, dejaron de servirnos de comer..., tampoco les daban de comer a los centinelas alemanes. Hasta nuestras diminutas celdas llegaba un humo muy denso. Lo más probable es que los agentes de la Gestapo quemaran sus archivos.
»Aquella noche oímos muchos gritos. Un soldado de mayor edad, muy amable, Friedrich Felge, de Hannover, me dijo:
»Tenemos aquí ahora a un sonderführer, uno de los jefazos de Berlín. Ha mandado arrestar a un traidor. Aquí, en Marsella, le llaman el Calvo.
»Sabía que en su vida pública, el Calvo se llamaba Dantes Villeforte y que, en efecto, era un traidor..., ¡pero un hombre que había traicionado a Francia, un confidente del SD! El 27 de agosto huyeron los de la Gestapo. Gritamos y pegamos contra las puertas de nuestras celdas, pero en vano. La mañana del 28 de agosto abrieron mi celda. Un hombre vestido de paisano, muy elegante, me dijo en un perfecto francés:
»"Está usted libre como todos sus compañeros. Dentro de pocas horas llegarán los aliados. Asuman la vigilancia del edificio y del prisionero encerrado en los sótanos. Es un asesino y un confidente del SD, que ha entregado a infinidad de sus compatriotas a los alemanes."
»El hombre desapareció. Entregamos a Villeforte a una comisión aliada, que inmediatamente lo mandó arrestar. Nunca más he vuelto a ver al hombre que nos liberó.